Hugo Stuven nos presenta su opera prima, ‘Anomalous’ (crítica aquí).
Su rostro puede sonaros de series como ‘Médico de familia’ o ‘Al salir de clase’ pero desde hace mucho tiempo su carrera dentro del mundo audiovisual ha ido por otros derroteros. Tras dirigir una cantidad considerable de cortometrajes se lanza al largo con esta propuesta que puede sorprender a propios y extraños. Para ello ha contado con Lluis Homar (entrevista aquí), Edgar Fox y Christy Escobar.
Habías co-escrito ‘Wax’, pero en esta ocasión escribes y diriges. ¿Qué tal la experiencia? Porque tengo entendido que ya tenías ilusión por dirigir un largometraje.
Si he hecho varios cortos y un documental que estuvo preseleccionado a los Goya que se llama ‘Tío Jess’. Es cierto que escribí junto a Victor Matellano ‘Wax’, pero vamos lo de dirigir me venía de antes. Mi primer corto lo dirigí en el 98 o antes, era bastante jovencito. Yo jugaba con mi cámara desde pequeñito. Yo quería dirigir. Poco a poco la vida te lleva por caminos y estuve escribiendo. ‘Anomalous’ es un proyecto que escribí en 2010 con David Zurdo y Fernando Acevedo. Buscar financiación siempre es complicado, vas a muchas productoras y te cierran puertas. Siempre pienso que tienes que estar como nadando en el fracaso y saber nadar en el fracaso. Al final llegará un punto en el que algo saldrá y no puedes estar pensando que todo lo que te sale fracasado es el fin del mundo porque si no al final no te sale nada. Ahora tengo 38 años y he currado mucho.
Mirando tu ficha en IMDB vemos que empezaste a dirigir nada más terminar de actuar en series…
Yo empecé a currar de actor. ‘Médico de familia’, ‘Al salir de clase’… pero yo no había estudiado interpretación y no me llenaba. Cuando hice mi primer corto, que se llama ‘El sótano’, con todos los chicos de ‘Compañeros’, yo estaba en el equipo de dirección de ‘Compañeros’, les propuse hacer un corto y todos se tiraron de cabeza. Antonio Hortelano, Carlos Castel… todos los que en esa época eran los más famosos del lugar. Hice mi primer corto, me llenó mucho y dije “esto es lo que me gusta”. Ahí empezó mi camino y dije que lo de interpretar lo dejaba para otros.
Aunque, y dicho de antemano esto no es spoiler, me ha parecido verte en algunas fotos en la película.
(Risas) Salgo varias veces en la película.
Yo te he visto muerto en una fotografía.
En la comisaría hay un tablón con fotos de los tres guionistas. Está David Zurdo, está Fernando Acevedo y estoy yo. Yo soy el malo menos malo. Hay un asesino en serie, otro es un violador y yo soy un roba carteras. En otras fotos sale más gente del equipo.
Hablando con más detalle de la película. Empleas metraje encontrado y rodaje clásico. ¿Cómo has hecho para encontrar un equilibrio entre ambos?
Desde un principio cuando empecé a escribir esta película, estaba un poco saturado de las películas de cámara en mano, metraje encontrado… no me gustaban, me aburrían. Pero la historia que escribíamos lo requería. Dije “bueno, si lo requiere, lo requiere. Pero que sea algo raro, diferente”. Tú ves las películas de metraje encontrado y el que graba siempre graba a alguien o son un grupo. Ahí tienes para desarrollar un diálogo y como guionista puedes ayudarte. Nosotros tenemos un personaje que se graba él solo, que no graba a nadie y que encima es esquizofrénico. Era la cuestión de hacer algo extraño, raro, anómalo. Él como mucho hablaba a la cámara, hablaba al doctor… fue un reto para Pablo Rosso (director de fotografía) y para mí encontrar puntos que dijeras, “cuidado que esto no sea demasiado movido…”. Muchos planos, casi todos los planos de reflejos los graba el propio actor, Edgar Fox. El resto de planos los graba Pablo y estaba Edgar al lado. Hay dos planos que empiezo grabando yo, luego sigue Edgar y termina grabando Pablo. Fue divertido. De todos modos, la película tiene más porcentaje de rodaje clásico que de metraje encontrado, huía de eso. Hay planos que duran lo mismo 10 segundos y dices que raro, pero claro, es que el chicho es raro, es anómalo. Aunque aquí todos son algo anómalos.
Si, incluso la agente que parece una simple agente estirada tiene algo raro.
Sobre todo, con la primera secuencia en el tren. Es algo muy sutil, muy sencillito. Dices “como puede ser que con solo una mirada esta chica que parece sencillita pueda acojonar a este ladrón con carnet, con tatuaje en el cuello”. El personaje de Christy, que además es su primera película, junto a Edgar que también era su primera película y yo que también rodaba mi primera película con Lluis Homar que es una maravilla. Fue una mezcla como rodar cámara en mano y rodar tradicional, gente nueva con gente con mucha experiencia.
Si porque además das un salto. De rodar como actor, pasaste a dirigir tus cortos y ahora te lanzas con un rodaje que se realiza en gran parte en Nueva York.
La experiencia increíble, eso ya para empezar. Lo de actor lo deje hace tanto… Trabajé en ‘Alatriste’ de auxiliar, en ‘Crimen ferpecto’… He estado currando siempre y haciendo mis cortos cuando podía y llevo buscando hacer mi primera peli mucho tiempo. Tienen que confiar en ti, tener el guión adecuado. Tengo otros dos guiones antes que lo intenté y no funcionaron… Si es verdad que hubo un momento que escribía por la mañana un guión y por la tarde otro y como que dije, no es esto, tengo que hacerlo ya.
Miguel Torrente se lo leyó en una semana. Es raro porque he ido a productores que te dicen “déjame el guión que te llamo” y te quedas en casa llorando del asco (risas). Y él es cierto, una semana y se lo leyó. Me dijo que le había fascinado.
Rodar en Nueva York imagínate. La primera vez en mi vida que voy, me viene a buscar un coche y digo, “madre mía que es esto”. Todo tan grande… todo es enorme tío. Todo son pelis, empiezas a flipar. Dices “tiro la cámara y el plano que salga mola, porque mola”. Luego lo preparamos todo muy bien, pero molaba todo.
Con los actores… Lluis es un hombre muy generoso. Me acuerdo que estábamos sentados en un restaurante, la primera vez que nos conocimos, tardamos en pedir más de una hora. El camarero ya estaba aburrido de nosotros. Estuvimos allí hasta que cerró y encajamos a la perfección, ahora somos super amigos. Una vez cada dos semanas nos llamamos a ver qué tal estamos, Lluis es una persona que te eleva el alma. Si te gusta trabajar con actores, que me gusta mucho, es una maravilla, te pide toda la información del personaje y más allá, no se me hizo pesado.
También está claro que has querido manejar un lenguaje cinematográfico que vaya a la par de la historia. No has plantado la cámara ahí y has puesto a hablar a los actores.
He querido jugar con planos, con ángulos, con sonidos. La música de Sergio Lacima es increíble, estoy súper contento con él. Es un chico que llegará muy lejos. Había muchos momentos que yo marcaba con Lluis si debía poner las manos encima o debajo de la mesa. Para parecer o no culpable, todas las veces que lo hace estaba pactado. Hay muchos detalles de ese tipo para lograr perfeccionar a los personajes.
Al final la película, es lo que siempre he querido hacer en esta primera película, habla sobre la culpa, sobre las injusticias, que no las soporto, y la mentira. En esta película al final todos tienen algo que ocultar. De un modo u otro no sabes si lo del personaje de Lluis es cierto o no es cierto… Hablando de esta dualidad, lo que ves con la cámara de David es una cosa en su mundo de enfermedad mental y luego llegas a la comisaría y Lluis te empieza a rebatir lo que acabas de ver. Esto queda un poco por mi obsesión desde hace muchos años por ‘Expediente X’, es algo así como al revés, cambiando los sexos del que cree en lo paranormal y la que no cree.
Todos estos elementos combinados con alguien que tiene esquizofrenia se potencian más. Para un esquizofrénico, que es una enfermedad terrible, su realidad es otra y se mezcla con la nuestra y es complicado. Estudiamos mucho esa enfermedad, los guionistas y yo. Hay cosas que no puedo decir porque son spoilers, que son científicamente ciertas.
Me has mencionado ‘Expediente X’ y yo te iba a preguntar si conocías ‘Fringe’. El personaje de Christy me recuerda mucho al de Anna Torv en esa serie.
Otra serie que me gusta mucho. Es curioso porque para elegir el vestuario de ella dimos muchas vueltas. Pero mi idea inicial, que la puse sobre la mesa, era que fuera Scully o la agente Dunham, blanco y negro, clásico. Le dimos muchas vueltas, lo mismo que hago con los guiones. Estoy en el punto A, doy una vuelta por todo el abecedario y me digo “si la A estaba bien”, pero por lo menos puedo decir que le he dado vueltas. Con el personaje de ella, la foto que tengo de referencia de ella en la carpeta es de ‘Fringe’. Totalmente captadas las referencias. También hay referencias muy sutiles a Seven.
Pues enhorabuena pues me ha gustado la película, mucha suerte con ella.
¡Hay! ¡Muchas gracias muy amable, que bien!