Chino Moya estrena con el apoyo de la productora de Ridley Scott
Filmin estrena este viernes 1 de julio, en exclusiva en España, la película de ciencia-ficción ’Undergods‘, debut de director español Chino Moya. Con un reparto internacional en el que encontramos a intérpretes como Géza Röhrig (‘El hijo de Saúl’), Ned Dennehy (‘Peaky Blinders’), Jan Bijvoet (‘Borgman’) y Johann Myers (‘El robo del siglo’), la película es una inquietante trilogía de historias sobrenaturales y oscuras ambientadas en una sociedad distópica, una Europa en ruinas en pleno declive físico y moral.
¿Cómo un director madrileño ha acabado dirigiendo una coproducción europea con el apoyo del British Film Institute y de Scott Free Productions, la productora de Ridley Scott? Como el propio Chino Moya recuerda: “Siendo español, sin haber ido a ninguna escuela de cine, sin cortos premiados, habiendo estado 10 años o más presentando proyectos en España sin recibir subvenciones, pensé que no me iban a dar nada en el Reino Unido, pero aún así presentamos el guion al British Film Institute”. El interés inicial que generó la película se multiplicó tras el Brexit y la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, distopías reales que daban una nueva dimensión al film. “El proyecto cogió fuerza y después de tres años de recibir noes permanentes, pasamos a los síes. Nos dieron dinero en Reino Unido. Había un pitch abierto en Bélgica y también nos dieron una subvención. Luego en Estonia… y de repente teníamos más inversionistas de los que necesitábamos”.
Su primera película se ubica en un limbo temporal, que el propio director define como “aquel en el que la gente se mueve entre los imperios utópicos fallidos del siglo XX y las pesadillas low-cost de IKEA del siglo XXI”. Moya construye un universo pesimista que es fiel reflejo de nuestro tiempo: “El optimismo de la posguerra ha sido reemplazado por un estado de permanente crisis y ansiedad. No se puede decir que el nuevo milenio haya traído mejoras a nuestras vidas. La cantidad se antepone a la calidad y las ganancias al bienestar – son los signos de una sociedad en declive”.
Asimismo, la película no es solo el retrato de un futuro gris, sino que Moya se atreve también a advertir, con la metáfora de una fábrica, sobre la deshumanización de la vida moderna: “Las utopías comunistas y fascistas, así como el capitalismo y el neoliberalismo coinciden en una fascinación por la idea del progreso. Todo está basado en generar, trabajar, construir más… y, al final, lo que hemos hecho es dañar el planeta. En la fábrica de la película vemos a humanos sometidos a un sistema brutal que se supone debería generar algo. Pero el sistema ha colapsado y ya no genera nada (…). Quiero que la gente se dé cuenta de que nos estamos encaminando a un precipicio y hay que parar”.
La historia de ‘Undergods’ tiene una visión futurista muy singular que combina lo sobrenatural del cine antológico de los años 80, como ‘En los límites de la realidad’, con el estilo visual que bebe de la ciencia ficción setentera, como ‘Stalker’, y una sensibilidad art-house europea. La película estuvo nominada en los Premios de Cine Independiente Británico (BIFA) en las categorías de Mejores Efectos Especiales y Diseño de Producción, y ha pasado con éxito por diversos festivales de cine de género como el Black Nights de Tallín o el Fantasia Film Festival de Montreal.