Argumento
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‘El vecino’ es una comedia urbana costumbrista que muestra la trastienda del mundo superheroico. José Ramón ha llegado del pueblo a la capital con un único objetivo: estudiar y aprobar sus oposiciones. José Ramón es aplicado, serio y tímido, y se encierra en casa con los libros durante horas interminables.
Una noche, José Ramón descubre que su ruidoso vecino de al lado es un superhéroe: la identidad secreta de Javier es Titán, un enmascarado con capa que se enfrenta al Doctor Tentáculos y otros supervillanos.
Titán tiene cuatro poderes, pero sólo conoce tres: superfuerza, invulnerabilidad y vuelo. Los obtiene de unas pastillas que le confieren sus características sobrehumanas durante un tiempo limitado.
Reseña
Cuando tu vecino viene a pedirte algo más que sal… sal corriendo
Allá por 2004 comenzaba con Astiberri la colección ‘El vecino’ realizada por Santiago García y Pepo Pérez. Hace diez años que no tenemos nuevo material recopilado de esta historia o que podemos decir que se dio por cerrada. Es su adaptación a serie por parte de Netflix con dirección de Nacho Vigalondo lo que saca de nuevo a este vecino a la balconada de la actualidad.
En ‘El vecino’ un joven provinciano llega desde su pueblo a la gran ciudad para opositar pero algo de su edificio que no se esperaba se interpone en su camino. No, esta no es la historia de Jesús Gil, quien vino a estudiar a Madrid y se alojó por primera vez en un edificio que hacía las veces de casa de citas. Esta es la historia de un habitante mundanal que se encuentra con lo extraordinario, con algo que interrumpe sus planes y además le cambia.
Su sinopsis y su inicio me daban la impresión de que sería algo muy al estilo ‘Green Lantern’ con tintes de ‘Superlópez’. Ciertamente esta es una novela gráfica que bebe mucho de los clásicos superheróicos. De entrada Titan, el superhombre de esta historia tiene los poderes clásicos: superfuerza, invulnerabilidad y vuelo, más un cuarto que jamás se ha desvelado. Como hacen los amigos de Green Lantern o Shazam en las películas que hemos visto el vecino se convierte en el escudero del justiciero. Y como acostumbramos a leer muchas veces en Spider-Man este saca partido de su propia condición de personaje popular o como en ‘Superman’ descubre con socarronería las contradicciones de llevar una doble vida.
Podemos llegar ahora a este material dividido en tres partes. Fueron publicadas en 2004, 2007 y 2009 y tengo entendido que originalmente se quería llegar a cinco números. No sé si las ventas no acompañaron, lo cierto es que el tercer volumen se presentó en blanco y negro en vez de a todo color y se hace bastante más difícil de leer. Puede que haya sido cosa de agendas pero no ha llegado el cuarto capítulo. Al menos ahora va a salir un recopilatorio con historias cortas publicadas en revistas, porque la cosa se queda pendiente, con algunos asuntos que cerrar.
Esta comienza siendo una especie de parodia sobre los tópicos del mundo bizarro, casi se burla de la condición de superhéroe y tiene un tono bastante dicharachero. Pasa a ser un severo drama bastante potente con daños colaterales y muchas reflexiones que afectan a las relaciones personales. En su desenlace intenta mezclar lo sembrado con anterioridad obteniendo una trama de líos de pareja bastante tediosos. Hay que señalar que esta no es una historia superheróica con explosiones y hazañas. La gracia está en que está hilada por el conocido de Titán, su vecino, el cual solo es conocedor de las heroicidades de su compañero de rellano, de lo único que es espectador es de sus penas y aspiraciones.
No es de extrañar que durante todo este tiempo haya sido calificada como costumbrista pues la vida de barrio está muy presente y el día a día se remarca mucho. Es extremadamente realista dentro de su ciencia ficción y cotidiano diría yo que es quizá el adjetivo que más le pega. Sus protagonistas hacen bastante alarde de patetismo y por eso nos hacen sonreír con sus gestos de pardillo. También brilla cuando consigue ser un thriller que además incorpora personajes constantemente.
Si que se lleva con gracia el ver como el superhéroe intenta combinar su vida secreta con la amorosa y la laboral. Pero el centro de atención del cómic, sobre todo en la tercera parte, está puesto en otros avatares, como la oposición de el vecino o diferentes escarceos amorosos que no vienen a cuento o están carentes de interés. Es una lástima que se pierdan con las páginas a ese villano educado y considerado a favor de la mayor presencia de unos personajes que nos sumergen en una especie de ‘Friends’ deprimente.
El dibujo es bastante básico y al menos permite reconocer a los personajes pero aporta muy poco más. Los colores empleados son planos casi limitados a lo primario. Lo mejor en cuanto al aspecto artístico es la composición de escenas y viñetas que son capaces de mantener momentos de suspense y desdicha.
Los tres tomos de la serie serán recopilados a partir del 28 de noviembre en uno solo con motivo del lanzamiento de la serie de Netflix. Los datos que mostramos en la ficha de a continuación están ajustados al nuevo formato que Astiberri va a publicar: ‘El vecino: origen’. En dicha edición habrá comentarios de Santiago García y bocetos con el proceso creativo de Pepo Pérez.
Ficha del cómic
Guion: Santiago García. Dibujo: Pepo Pérez. Editorial: Astiberri. Datos técnicos: 248 págs, cartoné, color, 22,5 x29,5 cm. Publicación: 2004-2019. Precio: Diferentes ediciones (web oficial).