Aún estamos esperando a tener nueva fecha de estreno para ‘Una pastelería en Notting Hill’ pues iba a haberse estrenado la semana pasada o a principios de agosto. Mientras aguardamos que llegue a las carteleras Filmax, su distribuidora en España, nos ha cedido el tráiler.
Está protagonizada por Celia Imrie (‘El exótico Hotel Marigold’), Shannon Tarbet (‘Killing Eve’) y Shelley Conn (‘Charlie y la fábrica de chocolate’). Completan el reparto Rupert Penry-Jones (‘Vita & Virginia’) y Bill Paterson (‘Fleabag’) y supone el debut en la dirección de un largometraje de su directora, Eliza Schroeder: “con esta película quería explorar diferentes luchas de mujeres que se aman y sin embargo, les resulta difícil conectar. También me atrajo hacer una película sobre tres generaciones. También quería retratar que cuando las mujeres se unen, podemos superar los obstáculos, hacer algo hermoso, fortalecernose inspirarnos mutuamente.
En segundo lugar, haber crecido en Alemania, estar casada con un hombre francés y vivir en Londres del Brexitme inspiró para retratar un Londres culturalmente diverso. Notting Hill, que ha sido mi hogar durante 11 años, se convirtió en el telón de fondo de la película, ya que siempre me ha inspirado este vecindario. Finalmente, después de haber perdido a mi propia madre hace unos años, quiero tratar la muerte de una manera digna, sin oscurecerla y restringirla, sino dejar que traiga esperanza y vida”.
‘Una pastelería en Notting Hill’ es una película sobre el dolor, sobre el arrepentimiento y sobre cómo intentamos seguir adelante tras un duelo trágico e inesperado. Pero en lugar de ser una exploración mordaz y triste sobre estos temas, la película profundiza en ellos de forma positiva y alegre convirtiendo el relato en un drama “feel-good”.
Sinopsis oficial.
Decidida a cumplir el sueño de su difunta madre de abrir una pastelería en Notting Hill, la joven Clarissapide ayuda a la mejor amiga de su madre, Isabella, y a su excéntrica abuela, Mimi. Estas tres generaciones de mujeres necesitarán superar el dolor, las dudas y las diferencias para honrar el recuerdo de su amada Sarah mientras se embarcan en un viaje para estableceren Londres una tienda llenar de amor, esperanza y coloridos pasteles.
El debut en la dirección de un largo de Eliza Schoeder es ‘Una pastelería en Notting Hill’. Filmax va a distribuir este título en cines y ha elegido el próximo 17 de julio7 de agosto como fecha de estreno. El protagonismo de este filme ha recaído en Celia Imrie (‘El exótico Hotel Marigold’), Shannon Tarbet (‘Killing Eve’) y Shelley Conn (‘Charlie y la fábrica de chocolate’). Completan el reparto Rupert Penry-Jones (‘Vita & Virginia’) y Bill Paterson (‘Fleabag’).
Es una película vital que narra la historia de superación de tres mujeres que consiguen vencer sus diferencias y aliarse para cumplir un sueño en común.
En palabras de la directora: “con esta película quería explorar diferentes luchas de mujeres que se aman y sin embargo, les resulta difícil conectar. También me atrajo hacer una película sobre tres generaciones. Quería retratar que cuando las mujeres se unen, podemos superar los obstáculos, hacer algo hermoso, fortalecernos e inspirarnos mutuamente.
En segundo lugar, haber crecido en Alemania, estar casada con un hombre francés y vivir el Londres del Brexit, me inspiró para retratar una ciudad culturalmente diversa. Notting Hill, que ha sido mi hogar durante 11 años, se convirtió en el telón de fondo de la película, ya que siempre me ha inspirado este vecindario. Finalmente, después de haber perdido a mi propia madre hace unos años, he querido tratar la muerte de una manera digna, sin oscurecerla y ni restringirla, sino dejar que traiga esperanza y vida”.
Sinopsis oficial:
Decidida a cumplir el sueño de su difunta madre de abrir una pastelería en Notting Hill, la joven Clarissa pide ayuda a la mejor amiga de su madre, Isabella, y a su excéntrica abuela, Mimi. Estas tres generaciones de mujeres necesitarán superar el dolor, las dudas y las diferencias para honrar el recuerdo de su amada Sarah mientras se embarcan en un viaje para establecer en Londres una tienda llenar de amor, esperanza y coloridos pasteles.
Nos han acompañado el cómico Quique San Francisco y el psicólogo y guionista David Pulido
La plataforma de entretenimiento de Sky mañana acogerá el estreno de su producción ‘Patrick Melrose’, la nueva serie protagonizada por Benedict Cumberbatch de la que os hablamos en esta reseña. Esta nueva historia nominada a 5 Emmys y basada en los libros de Edward St. Aubyn trata acerca de los traumas, las relaciones paterno filiales y las adicciones. Sobre esto último Sky ha organizado un estudio nacional que ha llevado a cabo el psicólogo y guionista ganador del Goya, David Pulido (‘Tarde para la ira’).
En la Fundación Patrick Melrose, que han creado con este motivo en el local de Kikekeller (Corredera Baja de San Pablo nº17, Madrid), nos han presentado junto al comediante Quique San Francisco los resultados de la encuesta. Tras un muestreo de 1000 personas entre los 18 y 60 años se han obtenido los siguientes resultados:
7 de cada 10 españoles se considera adicto a ver este tipo de entretenimiento.
El 41% dedica al menos una hora y media al día a ver series.
Al 72% le gustaría aumentar el consumo de series.
El 54% reconoce haber vistobuna temporada completa del tirón.
El 38% ha visto de 6 a 20 episodios seguidos alguna vez.
El 22% ha visto hasta 3 series simultáneamente.
Los géneros más recurridas son la ciencia ficción (24%), el humor (20%) y los crímenes (19%).
Las temáticas menos recurridas son la romántica, la histórica y la dramática con el 7% para cada una.
El 66% sufre ansiedad de ver que pasa en el siguiente capítulo.
7 de 10 personas se quedan viendo series a costa de quitarse horas de sueño.
El 17% reconoce haber llegado tarde al trabajo por ver series.
El 35% ha cancelado planes con amigos, pareja o familiares por ver sus series.
El 80% se divierte cada vez más viendo series.
En el acto San Francisco nos habló de las adicciones. Pero sobre todo habló de Patrick Melrose. Nos dijo que «Sky es como los camellos, el primer capítulo es gratis». También admitió cómicamente que «Patrick Melrose es mi ídolo […] politoxicómano, exitoso con las mujeres… es como yo pero en inglés».
Respecto a los datos o a la pregunta sobre si el enganche a las series puede generar preocupación David Pulido nos comentó que solo hay que ponerse límites. No se tiene que considerar patológico el hecho de estar con ganas de ver muchas series, no hay que llegar a casos como que la OMS haya calificado como enfermedad la adicción a los videojuegos. También puntualizó que la gente puede sentirse desplazada al no tener una serie que comentar en sus círculos sociales.
David Núñez, director de desarrollo de negocio de Sky en España, nos adelantó que podremos ver muchas series en la plataforma que arranca su temporada. Entre ellas estarán ‘The walking dead’, ‘El descubrimiento de las brujas’ (6 de noviembre), ‘El milagro’ (diciembre) o ‘Vikingos’.
Seguro que con muchos de estos casos os veis identificados. Esperamos vuestros comentarios y vuestras impresiones de ‘Patrick Melrose’. Os dejamos una galería con todos los elementos de la serie que hemos podido ver en la Fundación Patrick Melrose.
El Benedict Cumberbatch más freudiano que haya visto
El próximo 18 de septiembre tendréis ocasión de conocer a Patrick Melrose como hemos hecho nosotros ya que esta producción original de Sky y Showtime será estrenada a través de Sky en España. Esta es una mini serie de cinco episodios que ya se ha estrenado antes en el extranjero y que se ha metido de lleno en la lista de candidatos para los próximos Premios Emmy. Estas nominaciones y las próximas que le puedan caer no son de extrañar debida la calidad narrativa e interpretativa de la serie que ha dirigido Edward Berger (‘The Terror’) y escrito David Nicholls (‘Lejos del mundanal ruido’) basándose en las novelas de Edward St. Aubyn.
Tal y como hemos visto en los tres primeros episodios que nos ha permitido visualizar Sky, el señor Melrose es alguien al que le da igual consumir sustancias depresoras que estimulantes. Igual le da al alcohol como lo hacía su madre que se atiborra de todo tipo de pastillas. Y es que intenta a toda costa y por medios externos a su cuerpo superar sus defectos emocionales surgidos a raíz de su complejo pasado. Un tiempo que estuvo dominado por un padre autoritario, imponente y con valores educativos bastante cuestionables.
Para encarnar a tan compulsiva y enmarañada persona se ha elegido a Benedict Cumberbatch, quien demuestra una vez más lo capaz que es de cambiar de registro. En su interpretación de este personaje de la clase alta inglesa domina desde los andares hasta el habla, incluso cuando conversa consigo mismo, procurando exteriorizar todo un discurso sentimental. No es fácil actuar como alguien tan destruido pero a su vez destructivo, caprichoso, puntilloso y paranoico, que no obstante denota determinación, sin caer en tópicos. Cumberbatch hace esto evitando sobreactuar, fallo en el que no le habría costado caer teniendo en cuenta la cantidad de tiempo que acapara la cámara en solitario.
Como es obvio el protagonista es Patrick Melrose pero en algunas retrospectivas o incluso episodios enteros cede el protagonismo a sus padres. Porque la serie nos transporta también a esa infancia traumática en la que le llevaban a veranear a una villa del sur de Francia. Es entonces cuando vemos que esta no es una serie hecha solo para un actor ya que es cuando también vemos grandes interpretaciones por parte de quienes hacen de padres de Melrose: Hugo Weaving y Jennifer Jason Leigh.
Sobre todo es Weaving el que os va a dejar estupefactos. Nos olvidamos aquí del actor que tanto se gusta con personajes del corte de Elrond de ‘El señor de los Anillos’ o el Agente Smith de ‘Matrix’. Su carácter más dramático surge con este intransigente y temible hombre al que hasta sus amigos tenían pavor.
Debido a este plantel de personajes y parentescos la serie nos puede recordar, también por proximidad, a ‘Matar al padre’. Como decía la figura metafórica de Freud, con la expresión «matar al padre» se simboliza el paso a una vida al margen de nuestros progenitores o una puerta abierta a nuestros deseos reprimidos. Estas dos series tan freudianas no tienen nada que envidiarse la una a la otra. Ambas tienen una concepción muy sólida de sus personajes, son series de corta duración, saltan de una época a otra con gran elocuencia y sobre todo plantean una relación paternofilial bastante peculiar surgida de un padre muy poco común. Obviamente ambas producciones ofrecen narraciones diferentes y en cuanto empezamos a analizar uno a uno a sus personajes y actores vemos muchas más desigualdades. Es muy importante recalcar que ‘Patrick Melrose’ hace mucho énfasis en la capacidad de los psicotrópicos (para evadir la realidad o anestesiar el dolor tanto físico como espiritual) y la correlación de todo con los traumas y la muerte.
Esta mini serie consta de cinco episodios titulados como las cinco novelas en las que se basa cada uno: ‘Never mind’, ‘Bad news’, ‘Some hope’, ‘Mother’s milk’ y ‘At last’. Están ambientados desde los 60 hasta principios del siglo XXI. Han sido tratados como un drama muy drástico pero también brindan momentos muy cómicos. Principalmente cuando el protagonista oye una voz en su cabeza que lejos de ser su conciencia le insta a hacer lo incorrecto de la manera más correcta.
A parte de tener que agradecer el volver a reunir en el mismo saco a Hugo Weaving y a Benedict Cumberbatch (ambos están en el universo cinematográfico de Marvel y trabajaron en la trilogía de ‘El Hobbit’) hay que reconocer que la serie de Sky aprovecha de manera muy condensada los argumentos de la novela. Es una serie muy a tener en cuenta, no solo por apreciar su carácter artístico sino también por su capacidad reflexiva.
Junto a los actores ya citados podréis ver a AnnaMadeley (‘The Crown’), BlytheDanner (‘Los padres de él’), Allison Williams (‘Girls’), Pip Torrens (‘The Crown’), Jessica Raine (‘Llama a la comadrona’), Prasanna Puwanarajah (‘Doctor Foster’), Holliday Grainger (‘Strike’), Indira Varma (‘Juego de Tronos’) y Celia Imrie (‘Bridget Jones’s Baby’).
Cuando ‘Lady’ Sandra Abbott (Imelda Staunton) descubre que su marido, con el que está casada hace 40 años, tiene una aventura con su mejor amiga, busca refugio en Bif (Celia Imrie), su hermana mayor. Las dos son diametralmente diferentes. Sandra es un pez fuera del agua en comparación con su descarada hermana que encadena citas sin el más mínimo complejo.
Sandra necesita probar algo nuevo y, de mala gana, deja que Bif la arrastre a su clase de baile donde poco a poco empieza a encontrar el ritmo… y el amor.
Crítica
Comedia ligera balanceada con drama y baile.
Imelda Staunton protagoniza una nueva película acercándose de este modo a los cien títulos en su carrera. ‘Mucho ruido y pocas nueces’, ‘Little Britain’, ‘Pride’… No cabe duda de que la comedia es su punto más fuerte y si de algún modo puede acaparar papeles principales es en ese género. Aunque también la hemos disfrutado en ‘Vera Drake’ o en ‘Shakespeare in love’ títulos con más tintes dramáticos. En ‘Bailando la vida’ nos da una de cal y otra de arena, combina tanto humor como desventura, aunque parece que lo que más se impone en esta ocasión es el drama y esto lo podemos extrapolar al resto de la película.
Al igual que en el reciente estreno español de ‘La tribu’ nuestra protagonista sufre un revés en su perfecta vida y descubre que bailar es un medio ideal para ausentarse de su pasada realidad y ponerse en una posición que la hace más feliz de lo que era antes. Todo esto viene aderezado con un tipo de humor que se podría decir es diametralmente opuesto al de la película de Fernando Colomo, por supuesto. El humor inglés obviamente está presente, no tiene ni una frase ni una escena que se pase de la raya. ‘Bailando la vida’ es una comedia bastante cordial y sencilla con un guion bien estructurado en cuanto a ritmo pero quizá excesivamente cargado de tragedias. No hacía falta tanto contraste trágico para una comedia que tampoco es hilarante.
Pero la música y el baile no son los únicos revulsivos que encuentra la aristócrata que interpreta Imelda Staunton. Celia Imrie hace las veces de su reencontrada hermana en la ficción y como su personaje es radicalmente diferente tienen choques en ocasiones divertidos. Tanto ella como la pandilla variopinta de amigos londinenses en la que le sumerge le descubren el amor y la vida procaz que llevan, como si fuesen unos púber encerrados en los cuerpos de un sexagenario. Como he dicho antes esto nos lleva a situaciones cómicas bastante contenidas, pero también a muchos puntos la mar de tristes.
Esto nos acerca a algo curioso del filme. Porque con una de las personas con las que más escenas comparte Imelda Staunton en esta película es con Timothy Spall. Un actor con quien tiene en común dos grandes títulos como ‘Harry Potter y la Orden del Fénix’ y ‘Harry Potter y las Reliquias de la Muerte – Parte 1’ pero con quien jamás había compartido un set de rodaje, con quien nunca había rodado una escena. Esto no ha sido impedimento para que ambos funcionen bien en pantalla, para que haya química, no solo entre ellos, sino también con Celia Imrie con quien si había trabajado Staunton en ‘La niñera mágica’ o con quien Spall si que había coincidido en películas como ‘Un golpe brillante’.
Lo que nos transmite ‘Bailando la vida’, más que siempre estás a tiempo para encontrar el amor, es que siempre puedes darte cuenta de cuáles son tus prioridades y el estilo de vida que has querido llevar. No me ha parecido una película romanticona como sugiere su tagline «nunca es tarde para el amor», es más acertado (aunque comprendo el cambio por la dificultad de la traducción) el empleado en su versión original «everyone deserves a second dance» (todo el mundo merece un segundo baile). Hace un juego de palabras con la expresión chance (oportunidad) y dance (baile) en el sentido de que ni es tarde para disfrutar del amor, ni para descubrir nuevas vivencias.
Otro hecho curioso es que dos de los amigos de las protagonistas residan en dos barcos llamados Mayflower y Philona. Esto tiene su sentido, no solo son dos barcos emblemáticos que realmente se puedan encontrar por los canales de la City. El primero tiene el nombre de la que fue la embarcación que transportó por primera vez ingleses a tierras norteamericanas. ¿Significado de esto? Quizá su presencia se deba al hecho de que la protagonista se embarque en una nueva aventura en tierras hasta entonces inexploradas para ella. Y Philona es un barco de la Pequeña Venecia que al igual que esta película hace mucha referencia al baile dado que está decorado con músicos y bailarines. Puede que sea darle mucha vuelta de tuerca a algo anecdótico o puede que el director Richard Loncraine no haya querido dejar nada al azar en su película.
Hacer examen de conciencia, poner los pies en la tierra, tomarse el día a día o el amor de otra manera, mirar los reveses de la vida y esperar a la muerte con sentido del humor… son temas que se han manejado muchas veces en el cine. ‘Bailando la vida’ no viene para deslumbrarnos con nada transgresor. Es una comedia ligera que nos entretiene y puede que según en qué momento de tu vida te coja te toque la fibra sensible.
Ficha de la película
Estreno en España: 20 de abril de 2018. Título original: Finding your feet. Duración: 111 min. País: Reino Unido. Dirección: Richard Loncraine. Guion: Meg Leonard, Nick Moorcroft. Música: Michael J. Mcevoy. Fotografía: John Pardue BSC. Reparto principal: Imelda Stauton, Timothy Spall, Celia Imrie, David Hayman, John Sessions, Joanna Lumley. Producción: Eclipse Films, Catalyst Global Media, Powder Keg Pictures. Distribución: Wanda Visión. Género: comedia, romance. Web oficial:https://www.findingyourfeetfilm.com/
Un joven y ambicioso ejecutivo es enviado a rescatar al presidente de su compañía de un idílico pero misterioso “centro de bienestar” perdido en un lugar remoto de los Alpes Suizos. Pronto, empieza a sospechar que los milagrosos tratamientos del spa no son lo que parecen. Cuando empieza a descifrar sus secretos más aterradores, su cordura empieza a ser cuestionada y es informado de que padece la misma enfermedad que mantiene allí a todos los pacientes en busca de una cura.
Crítica
Bien está lo que bien acaba, pero no es el caso.
Antes de ver películas está bien leer críticas para que como sucede en este caso podáis curaros de espanto. No digo que no haya gente que no disfrute este largometraje de Gore Verbinski, sé de compañeros que lo han hecho, pero en mi humilde opinión pienso que es un relato desaprovechado que se pierde con tanta repetición y con tanta previsibilidad. Su planteamiento (muy semejante al de ‘Shutter Island’ pero lejos de su nivel) es interesante y podría haber estado a la altura de relatos clásicos de intriga. Pretende ser demasiado ambiciosa, tal vez se encuentre ahí su desmesurada duración.
Recordemos que Gore Verbinski ya se encargó del no tan malogrado remake de ‘The Ring’ (película en la que también incluía un choque ciervo-coche). En ‘La cura del bienestar’ emplea igualmente imágenes inconexas y una historia remota que se desvela o modifica muy poco a poco. Con esos elementos se suele conseguir generar intriga o por lo menos interés. Esta técnica o método suele funcionar pero solo cuando el resultado final es impredecible o se muestra con un giro sorprendente. En este largometraje podemos predecir constantemente lo que va a suceder o por qué ocurren ciertas cosas. Nada más completar la introducción y conocer a los protagonistas nos hacemos una idea del desenlace, no hacía falta alargarla durante casi dos horas y media. La pena es que su final parece propio novelas clásicas del siglo XIX pero se ha gestionado de manera muy bizarra y desesperada. Lo cierto es que en la época de Boris Karloff o Vincent Price este filme se habría ejecutado y disfrutado mejor.
Para estirar la idea entorno a la que se mueve la película se introduce al protagonista y por lo tanto al espectador en un bucle harto repetitivo y monótono del que da la impresión de que nunca se va a salir. Y no me refiero a que el personaje de Dane DeHaan se vea atrapado en el sanatorio, me refiero a que el esquema del filme se repite por lo menos cuatro veces sin proporcionar avances significativos.
En los tráilers ya nos planteaban una buena fotografía, o por lo menos más de una imagen que recordar. Pero no se le saca provecho ni argumentos a dichos fotogramas. La única función que se le encuentra a su diseño de producción es la de trasladarnos a una atmósfera fuera de nuestro tiempo y fuera de nuestro mundo «civilizado».
La película tiene unos cuantos actores de calidad pero el guión desmerece su talento. En particular tenía bastante puesto el punto de mira en el personaje central de la historia. Esto es porque le interpreta la joven estrella Dane DeHaan, el cual va a encarnar próximamente a Valerian en la adaptación del cómic. Por mi parte creo que es de lo poco salvable del filme, le veo bien para abordar personajes con peso. Aunque ya me venía encandilando desde que le vi en ‘Chronicle’ o ‘The amazing Spider-Man 2’.
Me ha parecido casual, y que esto solo sirva como curiosidad de cierre, que Jason Isaacs se vea aquí relacionado con criaturas serpenteantes a la vez que con sucesos extraños en seres humanos. Encarnó al Lucius Malfoy de Harry Potter (lo digo por las serpientes) y al científico captor de ‘The OA’. Es como si hubiese cogido dos personajes y los hubiese fusionado en uno.
Ficha de la película
Estreno en España: 24 de marzo de 2017. Título original: A cure for wellness. Duración: 156 min. País: EE.UU. Dirección: Gore Verbinski. Guión: Justin Haythe, Gore Verbinski. Música: Benjamin Wallfisch. Fotografía: Bojan Bazelli. Reparto principal: Dane DeHaan, Jason Isaacs, Mia Goth, Susanne Wuest, Celia Imrie, Lisa Banes. Producción: New Regency Productions, Blind Wink Productions, Studio Babelsberg. Distribución: 20th Century Fox. Género: thriller. Web oficial:http://www.acureforwellness.com/
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