Nueva sobredosis de salpicaduras de sangre y crítica
Por fin tenemos la cuarta temporada de ‘The Boys’ y la hemos visto con perspectivas de una quinta ya que Prime Video anunció su renovación, así como más ‘Gen V’ cuando resuelvan cómo manejar la ausencia de Chance Perdomo. ‘The Boys’ T4 llega el 13 de junio y además lo hace con estreno de triple episodio. Serán ocho capítulos cuyo final culmina el 18 de julio. Hemos podido ver todos los capítulos salvo el último, pero aún así os garantizamos que no hay ningún spoiler en esta reseña.
Todos los lectores del cómic comentaron que la temporada 3 se había suavizado, si creedme, con respecto al material original. La serie estuvo hardcore pero se cortaron con algunas escenas. Con la temporada 4 de ‘The Boys’ los paños calientes brillan por su ausencia y se mantienen las tradicionales sorpresas sangrientas y sexuales con las que nos tienen acostumbrados y que se mantuvieron también en ‘Gen V’, spin-off con el cual por supuesto ha conectado como esperábamos. Llegan nuevos giros que van más allá de las explosiones hemoglobínicas, que amplían la trama cuando pensábamos que no se podía estirar más el chicle. Nuevas alianzas, unas peligrosas elecciones, detalles del pasado de algunos protagonistas… El tiempo que hemos pasado sin nuevos episodios sin duda ha servido para enriquecer los guiones.
Sin duda un adjetivo que describe a ‘The Boys’ es ofensiva. ‘The Boys’ T4 mantiene el sentido de humor negro y esa sátira que se burla, no solo del mundo de los calzones y más mallas, también del stars-ystem, de todo aquello que es gubernamental, del corporativismo, de los fanatismos y el fandom, de la USA católica y conservadora, de Barrio Sésamo, de la Disney… Es como si los autores de ‘Injustice. Gods among us’ se hubiesen puesto a tope de drogasy diatriba crítica cuando los crearon.
En esta temporada estamos sumergidos en una campaña electoral, con Carnicero intentando recuperar a su hijastro antes de que se le acabe el tiempo, con Patriota aún más loco si puede ser, con Los Siete cambiando su alineación… La temporada está más repartida que nunca y todos los personajes tienen arcos argumentales de peso, protagonismo y giros que les aportan una evolución. Y aún así hay espacio para introducir nuevos personajes, al fin y al cabo hay que llenar los huecos que quedan tras tanta masacre y muertes viscerales. Susan Heyward, ValorieCurry y Jeffrey Dean Morgan, son las nuevas caras en la serie. Alguien con personajes tan comiqueros y cabroncetes como El Comediante y Negan tenía que estar en ‘The Boys’. Pero su papel está más relegado a un segundo plano, Heyward y Curry tienen mucho más que contar con sus personajes. Eso sí, la sensación es como en las últimas temporadas de ‘Juego de Tronos’, que vamos excesivamente rápido de un lugar a otro, sin elipsis o control sobre el tiempo fílmico.
Poco se puede decir ya tras tres temporadas y un spin-off que ha mantenido un nivel apabullante. ¿Qué sigue habiendo muertes brutales? Si. ¿Qué el nivel de sátira es extremo? Si. ¿Qué se aleja del cómic pero sigue siendo tan interesante como malsana? Si. Pero además de eso trae partidas de futbolín, bailes sobre hielo que se mofan de Disney, una ComicCon de conspiranoicos, videojuegos a lo Moral Kombat, escenas violentas psicodélicas… y esto es lo más flojo que vais a ver en esta carnicería de serie. Con ello también nos llega la sensación de que ya no hay espacio para la sorpresa, nos vemos venir los momentos soeces y las masacres, lo cual ya le está quitando algo de gracia.
Ya que os he ahorrado los spoilers permitidme que os ponga los títulos de los ocho episodios de ‘The Boys’ T4 y deje que vuele vuestra imaginación.
TÍTULOS EPISODIOS:
EPISODIO 401: Departamento de juego sucio
EPISODIO 402: Vida en las cloacas
EPISODIO 403: Mantendremos la bandera roja ondeando
Conserva el ADN de ‘The Boys’ pero es una fórmula más diluida
Mientras aguardamos con ansia y expectación el regreso de ‘The Boys’ con una cuarta temporada, que se tomen el tiempo que haga falta para que salga bien y vuelva con el nivel adecuado, llega ‘Gen V’. Con esta serie de ocho episodios que se estrena el 29 de septiembre en Prime Video se expande el mundo iniciado por Garth Ennis y Darick Robertson en los cómics.
Realmente ‘Gen V’ está basada en ‘The Boys Volumen 4: We Gotta Go Now’. Es un arco autoconclusivo de los cómics en los que los autores parodian a los X-Men, llamándoles G-Men. La academia, el mentor que dirige todo y los jóvenes inexpertos y confundidos están presentes. Pero es lo poco que se coge prestado de las viñetas y esta es una adaptación mucho más libre que el resto de lo que hemos visto en ‘The Boys’. Y tal vez habría que dar las gracias pues en esta parte del cómic hay suicidio y pederastia hasta límites desagradables. Adaptarlo al pie de la letra podría haber hecho que los estallidos de violencia y sexo que hemos visto hasta ahora parezcan un episodio de los Osos Amorosos.
Por lo tanto esto está suavizado, no obstante no podemos olvidar en qué universo desfigurado estamos. Como no podría ser de otra manera la serie empieza fuerte, con escena sangrienta, un momento muy sanguinolento y traumático. A partir de ahí nos trasladamos a la facultad en la que ingresan aquellos que han sido inyectados con el V y que cumplen ciertos requisitos. ‘Gen V’ está cargada de sexo y violencia explícita, pero por encima de todo ello está la comedia que desarrolla. Sigue siendo una parodia de Norteamérica y del mundo de los superhéroes. En vez de ser una burla hacia las corporaciones y los principios de Estados Unidos está más centrada en el ámbito de las universidades y sus supuestos valores modernos de inclusión, proyección profesional, diversidad o igualdad.
Tenemos una facultad de lucha contra el crimen y una juventud que podría intuirse como ejemplar. Pero en otro intento de retratar a las generaciones de ahora se muestra como solo se aspira al postureo, los likes o el desfase sin pensar en consecuencias. Como decía ahora más que nunca la serie se parece a X-Men, a esos cómics en los que descubríamos lo que pasa con los alumnos del Profesor X. Pero evidentemente desde un punto de vista sátiro. En ‘Gen V’ hay mutantes entrenando para ser superhéroes y optar a unirse a la élite o al servicio de una corporación, una visión desfigurada y traumática de los superhumanos, una protagonista que ha perdido a sus padres… Si lo acotamos al mundo de los mutantes de Stan Lee a lo que podríamos decir que más se parece es a ‘The New Mutants’. Unos personajes se encojen, otros doblan metales, otros cambian de género, otros empatizan mentalmente con los de su alrededor, otros echan fuego, otros manipulan la sangre… Imaginad el juego que dan estos poderes en un mundo tan retorcido como el de ‘The Boys’.
Evidentemente hay un inmenso ejemplo de luz de gas, y no es por el personaje que se enciende cual esfera de helio ardiente. Esta continúa siendo una narración en la que se intenta desvelar un gran secreto, en la que se busca desvirtuar la imagen de Vaughn. Pero también se postula como la historia de los herederos de Los Siete y como spin-off de ‘The Boys’ que es, como la sucesora de esta. Lástima que pierde con tanto amorío y hormonas adolescentes. Por cierto, por favor, dejad de hacer versiones tan cursis a partir de las canciones de Metallica.
Como curiosidades encontraréis muchos detalles que enlazan con ‘The Boys’ y pormenores que revelan que por aquí pasaron previamente los superhéroes que hemos visto “salvando” el mundo en las tres temporadas. Por supuesto aparecen algunos personajes de ‘The Boys’, pero no os diré cuáles. Como añadido, entre los nuevos protagonistas nos encontramos con Golden Boy, interpretado por Patrick Schwarzenegger, que podréis imaginar de quién es hijo.
Cuando un joven John Wick sale de la prisión y se embarca en su primera vendetta épica, se enfrenta a una extraña y poderosa comunidad de asesinos y debe aprender a dominar el Libro de Reglas que guía su negocio letal. ¿Quién son los Tres Bills? ¿Quién es Calamidad? ¿Y quién era John Wick antes de convertirse en Baba Yaga?
Reseña
Una historia de orígenes con mucha acción sin olvidar los elementos claves
John Wick, Juan Mecha, para los amigos de España, es un ídolo de masas que va más allá de lo que se denomina normalmente un «fenómeno de culto». La primera parte de su saga sí que comenzó su andadura casi de tapadillo siento toda una sorpresa de popularidad y convirtiéndose en un personaje mítico interpretado por Keanu Reeves, otro más. En el caso de ‘Pacto de sangre’ ya hablamos de un título esperado en el que el público demandaba algo ya en concreto: un actor haciendo algo que se le da bien, una música acorde, una estética cuidada y una historia con un trasfondo bien encajado.
Las historias de John Wick van más allá de un simple sicario con un objetivo. Hay un asesino con algo personal pendiente, hay una peculiar organización secreta detrás, El Continental. Se prendió una mecha, la de un hombre de armas tomar, la de un tipo capaz de cruzar cualquier continente para terminar con todo aquel que se interponga en su camino. Hechos los chistes fáciles sobra decir que está justificada la esperadísima tercera parte cinematográfica que está por llegar y que concluirá la trilogía dirigida por Chad Stahelski. Pero como otras muchas películas de matones y asesinos todo empieza con el protagonista siendo el amo del cotarro, a si es que es normal que muchos quieran conocer el génesis.
La respuesta a todo esto está en los cómics. Las películas no parten de las viñetas pero si se ha empleado el noveno arte para explicar la primera cruzada vengativa de Wick. Esto lo ha hecho Dynamitey lo ha editado de manera digital. Por lo tanto tenemos disponible en la red una precuela dividida en cinco entregas, una historia conclusiva en la que podemos ver al pistolero en sus primeros asesinatos.
Digamos que aquí comienza a forjarse la leyenda de Baba Yaga. Se ilustran sus primeros pasos en la enigmática comunidad de asesinos pues se refugia por primera vez en las sucursales de El Continental. Por supuesto leemos aquí sus inicios dentro de esa reservada cadena de alojamientos donde vemos en las películas que sirve para descansar, abastecerse o encontrar un lugar de tregua. Es decir, nos remarcan el funcionamiento de esa organización.
Conocemos a un John Wick niño y a un John Wick que aunque entrenado es neófito en el mundo de los asesinos secretos o por lo menos es independiente. Aún así toda su motivación sigue reduciéndose a una vendetta, aunque esta le lleve más años.
Sin un dibujo fotorealista reconocemos a actores de las películas como Keanu Reeves o LanceReddick. Los primeros números están dibujados por GiovanniValletta (‘La imposible Patrulla-X’) y a partir del tercero coge los lápices MattGaudio (‘Vampirella’). Lo cierto es que el estilo de Gaudio es más preciso, más acertado con las formas, mucho más definido y encaja mejor con los colores de David Curiel (‘Miles Morales: Spider-Man’). Curiel ha sabido usar trucos clásicos de los cómics para darle a los dibujos ese toque sucio que necesitaban las viñetas. Cuando el color proviene de Inlight Studios (‘Vampirella’) se rellenan las formas con degradados demasiado artificiales, dando apariencias algo más plásticas. Por eso los números tres, cuatro y cinco se salen más de la estética de las películas. No obstante en cualquiera de las entregas vais a tener escenas muy cinematográficas, las dos entregas de las películas de Chad Stahelski han sido una inspiración de acción que dan de sobra para dar rienda suelta a nuevos tiroteos. Aunque tal vez no se ha sabido conseguir los planos característicos de las películas sí que se ha conservado ese colorido tan fluoresccente mezclado con tonos oscuros tan peculiar de la saga.
En lo que se refiere a nivel de guión el cómic está más aproximado a las películas. En las últimas entregas el color está más lejos del diseño de producción. Como decía si está más acertado estéticamente en sus dos primeros números, donde además se aproxima a lo que deber ser El Paso, lugar donde transcurre. Aunque el dibujo si se mantiene, el color cambia y nos saca visualmente de una línea que inicialmente era acertada. También es un acierto que haya algunos componentes que se hayan mantenido. Como que Wick tenga esa fijación por las mascotas, que siga conduciendo un Mustang o que vista traje.
Buena historia que no para de tener acción, que tiene el gancho y el carisma del personaje y que nos quita el mono de John Wick mientras no tenemos nuevas películas. Muy bien traducida del cine al cómic.
Ficha del cómic
Guion: Greg Pak. Dibujo: Giovanni Valletta, Matt Gaudio. Color: David Curiel, Inlight Studios. Portada: Giovanni Valletta. Editorial: Dynamite (España: Fandogamia). Datos técnicos: 32 págs., color, grapa. Publicación: Septiembre 2017 (EE.UU.). Precio: 3,99$ (cada entrega, digital).
Uso de cookies
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies