Crítica: ‘Posesión infernal: El despertar’

En qué plataforma ver Posesión infernal: el despertar

Sinopsis

Clic para mostrar

‘Posesión infernal: El despertar’ se traslada fuera del bosque y se interna en la ciudad. Cuenta la intrincada historia de dos hermanas separadas, interpretadas por Sutherland y Sullivan, cuyo reencuentro se ve interrumpido por la aparición de demonios que poseen carne y que las empujan a librar una primitiva batalla por la supervivencia mientras se enfrentan a la versión de familia más pesadillesca que podamos imaginar.

Crítica

Si esto apunta a evento final, bien, si no, una más

Sucedió en los ochenta que un cineasta llamado a Sam Raimi con un actor llamado Bruce Campbell (nombres ahora harto conocidos) hicieron una película de terror ambientada en una cabaña perdida en medio de un bosque. Sucedió que la película no funcionó y años después decidieron hacer un remake versionándose y parodiándose a sí mismos. No son los primeros ni los últimos que han hecho esto, ahí está Alfred Hitchcock con ‘El hombre que sabía demasiado’ o Haneke con sus ‘Funny Games’. Pero quizá si es la ocasión con mayor éxito y no cabe duda de que aquella idea, que en su segundo intento fue toda una sensación y se convirtió en un género de culto, llevó al éxito a las dos personas que he citado antes. Esto si es autocrítica y visión comercial, no lo de Tommy Wiseau. En 2013, Fede Álvarez, un cineasta afincado en el terror, aceptó la tarea de hacer un remake o secuela espiritual, ahora sí, con un resultado terroríficamente bueno. La película que retomó la franquicia levantó susceptibilidades, pero gracias a su calidad visual, a sus truculentas escenas y al respeto por las líneas principales del guión original se ganó aplausos y el mérito de tener esta nueva parte de la que hablamos ahora.

El autor de ‘El bosque maldito’, Lee Cronin, es el encargado de dirigir y escribir esta nueva entrega que más que precuela o secuela habría que decir está dentro del universo de los anteriores títulos. Tanto la trama como los ingredientes que tiene cuadran con lo que nos ha venido dando ‘Evil Dead’ hasta ahora. Motosierra, litros de sangre propios de un récord, endemoniados diciendo groserías y por supuesto el libro de los muertos. Como siempre también tenemos un reparto sin grandes estrellas, el nombre más conocido es el de Alyssa Sutherland, conocida por ‘Vikingos’, que es la que tiene la mejor y más complicada interpretación, con permiso de Lily Sullivan cuya escena final me ha hecho recordar a Leticia Dolera en ‘[REC] 3’.

‘Posesión infernal: el despertar’ decepciona si buscas los planos de Raimi o si buscas más expansión del mundo demoniaco o de todo lo que rodea al Necronomicón. Si no fuese porque el detonante son como siempre las palabras malditas de invocación esta película podría llamarse ‘Mamá está poseída’, ‘Edificio infernal’ o llevar cualquier otro título tópico. Ya que Raimi y Campbell figuran como productores ejecutivos cabe la posibilidad de que se haga una entrega en la que confluyan todos los libros brujeriles uniendo definitivamente todas las ‘Evil Dead’. Por lo que cuentan muy de soslayo en ‘Posesión infernal: el despertar’ podría ser. Pero hasta entonces están siendo películas de terror bastante convencionales.

Álvarez no lograba alcanzar la narrativa tan efectiva de Raimi con sus planos y sus trucos de cámara, pero establecía un lenguaje propio muy potente. En esta ocasión salimos de la película entretenidos con toda la retahíla de salvajadas sanguinolentas pero con la sensación de haber visto algo que técnicamente es inferior. Aun así, Cronin usa bien los planos tomados con gran angular y aprovecha las tecnologías actuales, como los drones para realizar el vuelo del demonio que es marca de la casa. Homenaje a Raimi es el haber usado lentes casi iguales para rodar el filme y a Kubrick el detalle del ascensor. Y como curiosidad, el guión puede aludir a otra obra de Raimi como es ‘Doctor Extraño en el multiverso de la locura’ ya que tenemos una madre pelirroja que se corrompe con un libro maldito y acaba aterrorizando y poniendo en peligro a sus hijos.

Algo que no logro a entender por qué lo están introduciendo es el hecho de que las protagonistas luchen contra demonios interiores. En la película de 2013 hablábamos de una yonqui obligada a desintoxicarse y en esta tenemos a una mujer que se debate ante una posible maternidad. Son elementos que no aportan nada ni a la trama ni a la evolución de los personajes y parece que simplemente están injertados con cierta vergüenza para que esta no parezca una película más de sangre y sustos. Lo que sí que está lograda es la manera en cómo irrumpe en la vida de esta familia el Necronomicón y el cómo se quedan aislados aun transcurriendo la acción en Los Ángeles, por primera vez en una urbe alejada de los bosques aunque sin perder esa conexión. También es reseñable que esta sea la entrega con más personajes y eso la haga un poco más vertiginosa y llena de muertes.

Hay detalles que denotan un ligerísimo esfuerzo por ser algo originales. Pero si como decía esto es simplemente rehacer una historia sin expandir el universo original y no llegamos a tener una película o evento que conecte todo con cierta coherencia (a lo ‘Glass’), en el futuro hablaremos de meros episodios que quizá habría que haber publicado en streaming como estaba originalmente planificado.

Ficha de la película

Estreno en España: 21 de abril de 2023. Título original: Evil Dead Rise. Duración: 97 min. País: EE.UU. Dirección: Lee Cronin. Guion: Lee Cronin. Música: Stephen McKeon. Fotografía: Dave Garbett. Reparto principal: Alyssa Sutherland, Lily Sullivan, Morgan Davies, Nell Fisher, Gabrielle Echols, Jayden Daniels, Billy Reynolds-McCarthy, Tai Wano, Anna-Maree Thomas, Mirabai Pease, Richard Crouchley. Producción: Ghost House Pictures, New Line Cinema, Warner Bros., Wild Atlantic Pictures. Distribución: Warner Bros. Pictures. Género: terror. Web oficial: https://www.evildeadrisemovie.net/

Tráiler de ‘The Boys’ temporada 3

Con mucha sangre y sorpresas

Ya podemos ver imágenes de lo que se avecina con la temporada tres de ‘The Boys’. Una nueva tanda de episodios que podremos ver a partir del 3 de junio de nuevo en Prime Video. Una espera que la plataforma de Amazon ha querido edulcorarnos con una estupenda antología de la que os hablamos aquí y que viene a decirnos que se va a mantener el tono gamberro y despiadado que ha tenido hasta ahora.

‘Bones’ es la canción de Imagene Dragons que acompaña las imágenes del tráiler. Y huesos, sangre, sexo, poderes y muy mala leche es lo que vemos en el tráiler que ha sido lanzado. Lo que más sorprende es una aparición al final del vídeo y el ver a Butcher tan descontrolado y con superpoderes. Seguro que al personaje no le va a gustar nada esa nueva condición.

Igualmente a Patriota no le va a gustar la irrupción de un nuevo héroe, Soldier Boy, interpretado por Jensen Ackles. Lo tenéis todo en el siguiente vídeo que os va a dejar flipando y eso que es un teaser, ya veremos cuando llegue el tráiler y la temporada completa.

‘Stargirl’ nueva serie del universo de DC Comics

La tía de la vara cósmica

‘Stargirl’ está creada por el archiconocido escritor de cómics Geoff Johns, quien tras hacernos disfrutar en el papel con sus historias sobre Linterna Verde, Superman y compañía dio el salto a la televisión. Su mano ya ha hecho lo suyo en series como ‘Titanes’, ‘The Flash’, ‘Arrow’, ‘Doom Patrol’… Ahora nos trae el personaje que creó junto a Lee Morder en el 99. Courtney Whitmore es la protagonista de la nueva serie que HBO España ha estrenado este 19 de mayo de 2020.

Courtney Whitmore es una adolescente que se muda a una nueva ciudad con su madre, padrastro y hermanastro. Allí da con «El bastón cósmico», el cual pertenecía al desaparecido Starman. Es entonces cuando descubre que su padrastro se dedicaba a eso de vestir las mallas y comienza a entrenarse como superheroína, además de ir topándose con más secretos y sorpresas.

La serie tiene mucho sabor a todas las que está realizando The CW, del tipo ‘Arrow’, ‘Leyendas del mañana’, ‘The Flash’… Muy juvenil, con efectos especiales decentes y algo de humor (sobre todo por parte del hermanastro de la protagonista). También se acerca al tono de la película ‘¡Shazam!’, curiosamente este personaje en las viñetas tiene sus romances con Shazam o Robin.

Esta serie podría iniciar un nuevo «elseworld» que se topase en el futuro con otras adaptaciones comiqueras que hemos visto. Es decir, un mundo alternativo a cualquier línea temporal de los superhéroes de DC Cómics, de hecho ya ha habido cruce con ella en el arco pre-crisis. Incluso podría ser un punto de partida para un ‘Kingdom Come’, historieta en la que los héroes tradicionales están al margen y comienzan a surgir o enfrentarse otros nuevos superhéroes. Más razón me da el multitudinario arranque de la serie, al que no le faltan personajes bizarros. Tenemos un buen puñado de héroes y villanos como Solomon Grundy, Dr. Medianoche, The wizard, Wildcat, Tigresa, Brainwave, Icicle,  Hourman o Sportsmaster. En el inicio ellos han acabado con la JSA y parece que nos adelantan que los villanos van a ser los miembros de la Sociedad de la Injusticia.

Courtney Whitmore/Stargirl está interpretada por Brec Bassinger. Y no es la primera en ser este joven personaje de cómic. Ya apareció en ‘Smallville’ encarnada por Britt Irvin y en la «pre-crisis» de ‘Leyendas del mañana’ con el rostro de Sarah Grey. Las anteriores referencias que tenía de esta actriz eran la película ‘A 47 metros 2’ o episodios de ‘Los Goldbergs’, dos trabajos donde tengo que decir que me pasó totalmente desapercibida. Aquí hace de una joven malhumorada por su cambio de ciudad y de momento, al menos en el primer episodio no lo hace mal. Tampoco me parece mal la elección de Luke Wilson como Stripe, el padrastro de nuestra nueva heroína televisiva. Además de usar su peculiar humor va a bordo de un mecha haciendo las veces de lo que sería el «Robin» de Stargirl.

A muchos, entre ellos yo, les puede parecer que esta serie cumple unos topicazos como una casa. Tenemos al personaje marginado en su nuevo instituto, a la animadora ennoviada con el deportista de moda, al padrastro enrolladlo, al villano de clase alta que casualmente vive en el mismo pueblo… Si pasamos por alto esos clichés que los norteamericanos se empeñan en perpetuar podemos pasarlo bien con la serie ya que busca construir la historia de una protagonista bastante irreverente y atrevida, además de desbordarnos con muchísima ciencia ficción de cómic.

También puede parecer que en una serie de DC tenemos un guiño al Capitán América con el traje de Stargirl. Pero cabe señalar que la verdadera inspiración para Johns a la hora de idearlo fue Yankee Poodle de ‘Capitán Zanahoria’ (no confundir con el de Terry Pratchett). Además tanto Starman como Capitán américa nacieron en 1941. Lo que sí que son cameos o más bien huevos de pascua son el casco de Flash o la foto con tintes de Alex Ross que sostiene la protagonista y en la que vemos a los miembros de la JSA. Al igual que el camión de mudanzas que lleva a Courtney a su nuevo hogar, el cual se llama Action Movers, con la tipografía de Action Comics. Curiosamente existe una compañía de mudanzas en California (donde vivía Stargirl) con ese mismo nombre.

Me ha gustado el juego que da la vara con poderes gravitatorios y destructivos, muy pícara a lo capa de Doctor Strange repartiendo leña contra los abusones y malvados, a veces en contra de la voluntad de su nueva dueña. También el como con algunos temas musicales, cartelería, coches, autocine con los Goonies… nos imbuyen un toque vintage. Lo cierto es que me ha picado su piloto y voy a seguir viéndola.

Aparece un dragón en ‘Westworld’ y aviva la teoría que la relaciona con ‘Juego de Tronos’

Durante el segundo episodio de la tercera temporada

Muchos eran los que teorizaban acerca de los planes de HBO a la hora de finalizar dos series punteras como ‘Juego de Tronos’ y ‘Westworld’. La teoría más loca unía ambas series poniendo el mundo de R. R. Martin como una parte del inmenso y avanzado parque de atracciones. ¿Quién no querría coger un mandoble y apoyar a su familia favorita en la lucha del trono de hierro? ¿Los verdevidentes en realidad se conectan al servidor de Westworld y por eso ven todo lo que sucede, sucedió o ha sucedido?

Ahora HBO está exhibiendo la tercera y última temporada de ‘Westworld’ y en el segundo episodio ha introducido la posibilidad de que exista un parque medieval. Ello es debido al atrezo que encuentran los protagonistas pero también a un dragón que aparece muy claramente. El diseño de la criatura es idéntico al de Rhaegal, Viserion y Drogon, los hijos de Daenerys. Incluso los dos técnicos que aparecen con él podrían ser perfectamente David Benioff y D.B. Weiss. Desde luego Poniente está en la parte oeste del mapa de ‘Juego de Tronos’, puestos a creer…

Crítica: ‘Doctor Sueño’

Sinopsis

Clic para mostrar

Dan Torrance lucha por encontrar algo de paz a pesar de seguir irremediablemente marcado por el trauma que sufrió de niño en el Hotel Overlook. Pero esa paz se quiebra cuando conoce a Abra, una valiente adolescente dotada de un poderoso don extrasensorial, conocido como el «resplandor”.  Abra reconoce instintivamente que Dan comparte su poder y, desesperada, le pide ayuda para enfrentarse a la despiadada Rose la Chistera y a sus seguidores, El nudo verdadero, que se alimentan de los niños que poseen el don del resplandor en su búsqueda de la inmortalidad.

Dan y Abra forman una extraña alianza y emprenden una batalla a vida o muerte contra Rose.  La inocencia de Abra y su valor a la hora de aceptar su resplandor obligan a Dan a recurrir a sus propios poderes como no lo había hecho nunca. Deberá enfrentarse a sus miedos a la vez que revive los fantasmas del pasado.

Crítica

El vaporeo contra el resplandor

La obra de Stephen King continúa siendo adaptada y lo hace con una secuela de uno de sus títulos más míticos y a la vez de una de las adaptaciones que se ha convertido en clásico del terror moderno, ‘El resplandor’. ‘Doctor Sueño’ está avalada por el autor a diferencia de la película protagonizada por Jack Nicholson que hizo que King y Kubrick tuviesen ciertas diferencias. La bendición de King la tenemos hasta en la elección de Ewan McGregor como Danny Torrance el archiconocido niño con telepatía que se ha hecho mayor y vive en paz usando su habilidad para ayudar a ancianos a morir. El problema y detonante para tener una nueva historia es que el resplandor, en forma de vapor soltado al morir, sirve de alimento para otros que peregrinan por el país y una niña con mucho poder reclama la ayuda de Doc.

Mike Flanagan, el talentoso responsable de ‘La maldición de Hill House’, es quién se ha encargado de dar vida a ‘Doctor sueño’. Reconocemos tomas y secuencias enteras como marca clara del director, ha impreso su estilo en todo el material nuevo. Pero todo lo que vivieron los Torrance tenía que estar presente y es por eso que se han re-grabado y repetido las escenas ocurridas en el Overlook. Precisamente lo que pasa es eso, que como una nube de vapor las sensaciones a las que nos devuelven con imágenes re-rodadas de ‘El resplandor’ desaparecen en cuanto volvemos a las que se han filmado para recrear la nueva historia con Danny Torrance de mayor. El hotel y los protagonistas están muy parecidos e incluso clavados a los originales. La comparativa con el material nuevo hace que Flanagan salga perdiendo.

Y esto sucede principalmente no porque las nuevas escenas estén mal grabadas o porque no sea material bueno (hay varias partes que son visualmente apabullantes) si no porque hemos pasado de un terror dramático y psicológico a una historia de cine fantástico que poco miedo nos puede dar. Cuando McGregor usa la Fuerza, perdón, el resplandor, es cuando vemos que el filme abusa de ciertos recursos (muchos de ellos heredados) que hacen que este título sea muchísimo menos elegante y sutil que el que vimos en los ochenta. El carnival vampírico de yonkis vapeadores que persigue a los protagonistas nos habla de que esta es una película sobre poderes no sobre miedos o tragedias. Es más, el resplandor de esta película a veces pasa de la telequinesis a la telepatía, pecando de querer ser más espectacular.

Habrá costado convencer a King para idear esta película más como una secuela de la película de Kubrick que de su propia novela, al fin y al cabo tiene su lógica pues el gran público tendrá más presente la película de 1980. Me gusta que se haya hecho justicia con el final y considero que este no es un mal filme de cine fantástico pero ni de lejos podemos insertarla dentro del grupo de películas de terror. ‘Doctor Sueño’ alude a otros títulos de Stephen King cuando por ejemplo menciona eso de que «El ka es una rueda», una frase que enlaza con ‘La torre oscura’, con la que también conserva mucha similitud argumental. Y tal vez por eso de que los villanos entran en la mente de los buenos sea que hay un guiño a ‘Pesadilla en Elm Street’ en una de las tomas callejeras. En resumen, a mi manera de verlo esta es una continuación que está por debajo en calidad y en impacto de los títulos a los que alude pero que como entretenimiento de género está bastante bien.

Ficha de la película

Estreno en España: 31 de octubre de 2019. Título original: Doctor Sleep. Duración: 151 min. País: EE.UU. Dirección: Mike Flanagan. Guion: Akiva Goldsman, Mike Flanagan. Música: The Newton Brothers. Fotografía: Michael Fimognari. Reparto principal: Ewan McGregor, Rebecca Ferguson, Kyliegh Curran, Carl Lumbly, Zahn McClarnon, Emily Alyn Lind, Bruce Greenwood, Jocelin Donahue, Alex Essoe, Cliff Curtis. Producción: Intrepid Pictures, Vertigo Entertainment. Distribución: Warner Bros. Pictures. Género: terror, adaptación. Web oficial: https://www.warnerbros.es/doctor-sueno

Crítica: ‘Érase una vez en… Hollywood’

Sinopsis

Clic para mostrar

‘Érase una vez en… Hollywood’ de Quentin Tarantino, nos lleva a Los Angeles de 1969, donde todo está cambiando, y donde la estrella de la televisión Rick Dalton (Leonardo DiCaprio), y Cliff Booth (Brad Pitt), su doble de muchos años, se abren camino en una industria que ya prácticamente no reconocen. La novena película del célebre escritor y director cuenta con amplio reparto y múltiples tramas argumentales que rinden un tributo a los momentos finales de la época dorada de Hollywood.

Crítica

Como si hubiese jugado a un GTA en Los Angeles de 1969

Érase una vez… así empiezan muchos cuentos de hadas y en eso creen muchos que consiste forjarse una carrera en el reino estadounidense del cine llamado Hollywood. ‘Érase una vez en… Hollywood’, la novena película de Tarantino, no es un título que haya llegado para demonizar la industria ni sirve como un manual del buen o mal camino, es un recorrido que ilustra un momento de cambio a través de dos personajes, espectadores y a la vez protagonistas de la que convierten en su propia historia.

Leonardo DiCaprio interpreta a un famoso actor que está falto de confianza y encuentra su popularidad de capa caída, que se haya desesperado en esa época de grandes novedades. Junto a él está Brad Pitt que encarna a su doble de acción que a la vez es su amigo y hombre todo terreno. La acción se ubica en 1969 a si es que por ahí nos encontramos con personajes tan ilustres como Sharon Tate muy cándidamente interpretada por Margot Robbie. La película no tiene un objetivo manifiesto ni está habilitada con tantos cruces de tramas como ‘Pulp Fiction’, si no que sigue día a día a DiCaprio y Pitt, que la sostienen de lujo, pero cuando estos no están ‘Érase una vez en… Hollywood’ nos continúa maravillando igualmente con sus particularidades.

Nada más empezar, he de admitir que con esas escenas como salidas de las mini novelas de Silver Kane acompañadas de el grito de Wilhelm ya me ganaron. Pero por si no sois de Western solo con el elenco de nombres que ha reunido la película seguro que os conquistan: Brad Pitt, Leonardo DiCaprio, Margot Robbie, Al Pacino, Dakota Fanning, Kurt Russell, Emile Hirsch, Zoë Bell (que también ha vuelto a sus labores de coordinadora de especialistas)… Incluso podemos picarnos con la curiosidad de que esta fue la última película para el fallecido Luke Perry. Y siendo una película de Tarantino no tengo que deciros la cantidad de amigos y nombres famosos con los que os vais a cruzar, ¿no? Pero es que hay que tener en cuenta por otro lado a quiénes nos remonta con gran morriña: Bruce Lee, Polański, Sharon Tate, Steve McQueen, John Wayne, Edd Byrnes… Humaniza a esas grandes estrellas de un Hollywood lleno de gloria pero también de crónicas negras y conspiranoicas, que guardan un halo histórico y romántico. El filme evoca una época brillante del cine norteamericano en pleno ocaso, por todas partes invadida por una nueva ola cultural y la verdad es que el dúo que forman Pitt y DiCaprio está a la altura de las estrellas de aquellos tiempos, las sensaciones que nos aportan son las mismas que surgían por entonces, de las que hacía mucho que no se veían. ¡¿Por qué nadie había relacionado nunca antes la fórmula Pitt/DiCaprio?!

Lo de Brad Pitt transformado en un tipo de principios, aguerrido, trabajado, cuadrado, diligente y fiel es para quitarse el sombrero. Y la disciplina de DiCaprio a la hora de controlar los tartamudeos, la inseguridad y carisma así como otros dejes de su personaje también demuestran por qué un actor como él puede tomarse un descanso de cuatro años tras ganar el Oscar que tanto tiempo llevaba esperando.

Tarantino ha hecho lo que, como y cuanto ha querido. Es como si hubiese jugado a un GTA en Los Angeles de 1969. Tal es así que no hay una banda sonora como tal, la mayoría de temas musicales del filme proceden de la radio de los coches. Ha puesto sobre cuatro ruedas a dos genuinos personajes y les ha soltado por una ciudad magníficamente recreada, repleta de características, detalles e individuos con los que interactuar. Ha introducido detalles personales y que harán que si sois amantes del cine también se convierta una película que os lleve a un plano íntimo. Sí que es cierto que en mi lado más morboso había esperado algo más de introspección con el tema de los Manson, Polański y Tate, pero la gran lección de historia de cine, del cine que le gusta a Tarantino, a través del actor y su doble es una auténtica genialidad.

Ha merecido la espera por esta nueva película de Tarantino, aunque cada una que hace nos acerca más a su último título. Como siempre nos deja secuencias y frases para el recuerdo. Esta vez lo hace de nuevo acompañado del director de fotografía Robert Richardson con quien ya había trabajado en ‘Kill Bill’ o ‘Malditos Bastardos’, el cual también había inmortalizado a Leonardo DiCaprio en ‘El aviador’. Sus instantes, sus planos, sus secuencias son historia cogiéndole el pulso a la historia. Este combo de talentos os va a dar momentos que a mí por lo menos se me han grabado en la retina pero que quiero tatuar en mi memoria con un segundo visionado.

Esta puede tomarse como una narración vista desde un prisma «tarantinano», como un paseo repleto de referencias cinematográficas o puede ser una lección sobre la forja de las estrellas en Hollywood. Pero si algo me ha quedado claro con ‘Érase una vez en… Hollywood’ es que Tarantino ha hecho su mayor homenaje a la meca del cine, a la cultura que nos ha criado y en concreto ha escrito su gran carta de amor al western (sobre todo al de Leone), más grande aún que cuando hizo ‘Django’ o ‘Los odiosos ocho’.

Ficha de la película

Estreno en España: 15 de agosto de 2019. Título original: Once Upon a Time in Hollywood. Duración: 161 min. País: EE.UU. Dirección: Quentin Tarantino. Guion: Quentin Tarantino. Fotografía: Robert Richardson. Reparto principal: Brad Pitt, Leonardo DiCaprio, Margot Robbie, Maya Hawke, Sydney Sweeney, Dakota Fanning, Timothy Olyphant, Margaret Qualley, Al Pacino, Kurt Russell, Luke Perry, Damon Herriman, Emile Hirsch, Harley Quinn Smith, Zoë Bell, Bruce Dern, Scoot McNairy, Mike Moh. Producción: Bona Film Group, Heyday Films, Sony Pictures, Visiona Romantica. Distribución: Sony Pictures. Género: drama, comedia. Web oficial: https://www.onceuponatimeinhollywood.movie/

Crítica: ‘Ocean’s 8’

Sinopsis

Clic para mostrar

Cinco años, ocho meses, 12 días… y contando. Ese es el tiempo que lleva Debbie Ocean (Sandra Bullock) planeando el mayor robo de su vida. Y sabe muy bien lo que necesita: un equipo de las mejores en su campo, empezando por su compinche Lou Miller (Cate Blanchett). Juntas, reclutan a un equipo de especialistas: la joyera Amita (Kaling); la timadora callejera Constanza (Awkwafina); la perista Tammy (Paulson); la hacker Nine Ball (Rihanna); y la diseñadora de moda Rose (Bonham Carter). El objetivo es la bonita suma de 150 millones de dólares en diamantes, unos diamantes que colgarán del cuello de la actriz mundialmente famosa Daphne Kluger (Hathaway), que será el centro de todas las miradas en el evento benéfico del año, la Gala del Met. El plan es prácticamente infalible pero todo deberá ser perfecto si el equipo va a entrar y salir con el botín. Y todo a la vista.

Crítica

Cuidado si conoces a algún Ocean que te puede desplumar o enganchar a sus correrías

Los Ocean vuelven a la carga pero esta vez no de la mano de George Clooney, si no de Sandra Bullock que de varias maneras coge el testigo. Ahora sabemos que la estirpe de los Ocean lleva en la sangre el placer por robar y también que son capaces de arrastrar a otros a sus elaborados planes. ¿Qué nos ofrece la secuela tras tres películas de ‘Ocean’s’ a parte de todo un elenco nuevo compuesto por mujeres? Se planifica un robo distinto e imposible y se incorporan personajes nuevos que refrescan la saga que partió de un filme de 1960 también repleto de estrellas. La conexión entre los personajes está menos fundamentada y la relación entre las actrices despierta menos simpatía al tener peor dinámica entre ellas. Pero esta secuela, hay que tener presente que esto es una continuación directa, tiene la capacidad de entretenernos y posee varios atractivos.

La película la mantienen momentos puntuales de unas u otras protagonistas o todo el trabajo de Anne Hathaway. De todas las intérpretes es la que mejor encarna su rol y más creíble resulta. Rihana sigue sin encontrar la senda de la interpretación pero esta película le hará bien a la carrera de otras actrices, como es el caso de Mindy Kaling que a pesar de proceder de algo tan bueno como ‘The Office’ ha tenido el patinazo de ‘Un pliegue en el tiempo’. Y para ayudar a ganar interés además del elenco principal se ha mantenido la costumbre de la trilogía anterior. Se hace todo un desfile, a veces casi literal, de famosos y famosas que le dan a la película ese juego de huevos de pascua que tanto gusta. Tiene detalles del estilo como que en una toma en la que aparece una pared de nichos los nombres de los fallecidos son miembros vivos del equipo, como los responsables de los efectos visuales Frederick Lissau o Julie Long. También aparece la fallecida madre de Sandra Bullock, la soprano Helga M. Meyer. Además, como sospechábamos, tenemos algún cameo de las anteriores entregas.

En su aparición James Corden levanta bastante tanto el ritmo como la gracia de un filme que si bien es muy simpaticón no es una comedia pura y dura. Pero esa es la línea que marcó Steven Soderbergh en sus películas y como productor de esta habrá velado por que se conserve. En esta ocasión ya no dirige su trilogía pues ha sido capitaneada por Gary Ross. Un director muy solvente y eficiente que antes ya obtuvo buenos resultados con películas como ‘Seabiscuit’, ‘Los hombres libres de Jones’ o ‘Los Juegos del Hambre’. Se ha hecho cargo de la dirección y la escritura de ‘Ocean’s 8’ junto a Olivia Milch manteniendo el estilo original aunque con menos gancho. Incluso se repite algo el esquema de ‘Ocean’s eleven’ comenzando con la vista de una presidiaria, incluyendo un despecho amoroso y destacando a dos personajes del resto como cabecillas (Sandra Bullock y Cate Blanchet).

El plan de robo lo he visto menos elaborado que en otras entregas, por lo menos más falto de sofisticación y en su ejecución con algunos fallos. Pero se conserva la elegancia y la limpieza de la saga, así como el descaro y picaresca de los guiones. Es más, no tiene ninguna prisa para presentar y recolectar a todo el reparto y nos lo va presentando con calma. Eso se agradece pues ya hemos visto demasiadas películas que se tropiezan en su furor por poner a todos los personajes sobre la mesa.

Aparte de que tenga que soportar comparaciones con las originales y antigua esta continuación me da la impresión de que de haber sido la primera en estrenarse no habría tenido tanto éxito. En parte juega en su contra su título pues constantemente vemos a siete ladronas en el equipo y al final este número se amplía, a mi parecer a más de ocho y podemos imaginar quién falta. Pese a ello consigue ser una película de robos ágil, con los egos bien gestionados y con algunos atisbos de originalidad que le darán ideas al ladrón más pillo.

Ficha de la película

Estreno en España: 6 de julio. Título original: Ocean’s Eight. Duración: 110 min. País: EE.UU. Dirección: Gary Ross. Guion: Olivia Milch, Gary Ross. Música: Daniel Pemberton. Fotografía: Eigil Byld. Reparto principal: Sandra Bullock, Cate Blanchet, Anne Hathaway, Mindy Kaling, Sara Paulson, Awkwafina, Rihana, Helena Boham Carter, Richard Armitage, Elliot Gould, James Corden, Dakota Faning, Shaobo Qin, Olivia Munn, Kim Kardashian, Katie Holmes.  Producción: Warner Bros. Pictures, Village Roadshow Pictures, Smoke House Pictures. Distribución: Warner Bros. Pictures. Género: comedia, acción. Web oficial: http://www.warnerbros.es/oceans-8

Reseña: ‘Ready Player One’

 Argumento

Clic para mostrar

Estamos en el año 2044 y, como el resto de la humanidad, Wade Watts prefiere mil veces el videojuego de OASIS al cada vez más sombrío mundo real. Se asegura que esconde las diabólicas piezas de un rompecabezas cuya resolución conduce a una fortuna incalculable. Las claves del enigma están basadas en la cultura de finales del siglo XX y, durante años, millones de humanos han intentado dar con ellas, sin éxito. De repente, Wade logra resolver el primer rompecabezas del premio, y, a partir de ese momento, debe competir contra miles de jugadores para conseguir el trofeo. La única forma de sobrevivir es ganar; pero para hacerlo tendrá que abandonar su existencia virtual y enfrentarse a la vida y al amor en el mundo real, del que siempre ha intentado escapar.

Reseña

Aventura y retrato de una obsesión por los ochenta.

Ernest Cline llegó hasta nosotros con su primera novela, y pelotazo literario, en 2010, ‘Ready Player One’. Desde entonces ha logrado enganchar a miles de personas gracias a varias virtudes o trucos empleados en su obra. Uno de ellos es crear una historia francamente original, el segundo es generar interés con una crítica hacia la sociedad actual y el tercero, y que más lectores ha atraído, es tocar la fibra nostálgica de todos aquellos que han vivido los ochenta o gustan de su cultura. Vamos por partes.

Cline nos presenta un futuro algo distópico en el que un videojuego de realidad virtual, llamado Oasis, mueve al mundo entero. Un juego que presenta bastantes semejanzas con el recién estrenado ‘No man’s sky’ pero que va aún más allá. Un número ingente de planetas puede ser explorado y disfrutado por los jugadores online. Lo que ha hecho el autor con este videojuego es lo que hacíamos todos de pequeños: coger nuestros juguetes, sean de la serie, película o gama que sean y mezclarlos a nuestro placer. Es uno de los crossover frikis más grandes que se hayan hecho.

Estamos ante la clásica historia del típico joven de clase baja que no es nada popular en su instituto y que vive en un hogar roto. Nuestro protagonista aun así es un fuera de serie capaz de lograr proezas que muy pocos pueden. Ahí radica uno de los puntos que le resta verosimilitud al relato. Cuesta creer que un joven de 17 años haya alcanzado el grado de conocimientos sobre los ochenta, haya visto tantas series o películas y completado tantos videojuegos como un hombre que ha vivido y mamado esa época toda su vida.

La obra se sostiene bien, aunque tiene algún que otro desatino más. El personaje está sobreprotegido por el autor y en ningún momento se teme por su seguridad o se duda de que vaya a lograr su objetivo. La relación entre los personajes se desarrolla de un modo pueril y predecible, pero sus diálogos están muy bien construidos. El último tercio de la obra es el más interesante pues es donde se nos sumerge más en la realidad ideada por Cline. Dicho sea de paso, ‘Ready Player One’ no resulta verdaderamente atractiva hasta que alcanzamos aproximadamente la página 89 y Wade Watts (el protagonista) realiza un avance en la búsqueda del huevo de pascua. Y huevos de pascua, o guiños secretos, como los solemos llamar en España, tiene a mansalva.

En primer lugar hay que quitarse el sombrero por el homenaje que se hace al primer huevo de pascua que se programó, el experimentado en el ‘Adventure’ de la Atari, un servidor no lo encontró en su época. La novela está plagada de referencias y de alusiones, esencialmente a la década de los ochenta. Puede llegar a ser una sobrecarga de homenajes que distrae mucho la atención de la historia. Sin duda es un buen uso del provecho que se le está sacando últimamente a la nostalgia. Pero también cae en su propia trampa y llega a dar incluso la impresión de que de aquí a 2044 no se ha realizado nada ni nuevo ni bueno. Sin duda el lector objetivo es el fan de lo ochentero. Podríamos pensar que esto se ha hecho por el mero negocio de la venta de ejemplares, pero solo hay que entrar en la página web personal del autor para comprobar que es un gran fanático de ese período.

Vivimos en una época donde el mundo del entretenimiento está evolucionando por el peso que tiene en nuestras vidas y en nuestra economía. La red mantiene unidas a millones de personas que pueden llegar a pasar decenas de horas seguidas enganchadas a sus dispositivos. Los equipos de juego y visualización de contenido cada vez son más inmersivos. Las personas emplean la red y los videojuegos como su oasis, huyendo así del desierto que es su realidad. En Japón ya hay un serio problema con los hikikomoris y en la novela de Cline este es un problema tan extendido que pasa desapercibido e incluso se ve como algo normal. Este es uno de los problemas que pone de manifiesto y por supuesto es uno de los mensajes más importantes que nos transmite esta novela, el mundo real es el que nos puede aportar la felicidad y las vivencias que realmente merecen la pena.

‘Ready Player One’ es un éxito de ventas, eso es un hecho, las cifras están ahí. Un fenómeno que ya ha generado sensación hasta el punto de tener una buena librería de fanarts. El libro salió en 2011 pero en 2010 la Warner Bros. ya había comprado los derechos para hacer una película que, o modifica cuantiosas cosas o tendrá que batallar mucho con licencias y derechos de autor para poder introducir las referencias que tiene.

Ficha del libro

Autor: Ernest Cline. Editorial: Ediciones B. Datos técnicos: 464 pág., tapa blanda, 15x23cm. Publicación: noviembre de 2011. Precio: 18€.

 

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
Salir de la versión móvil