En qué plataforma ver The Walk-In
El ejercicio de reflexión y memoria histórica que necesitamos en este momento
Adaptando hechos reales y las novelas de Matthew Collins (‘Odio’ y ‘Terrorista nazi’) llega a Filmin ‘The Walk-in’. Una serie que narra la experiencia del propio Collins, quien fue en su día un activista y declarado neonazi, miembro del National Alliance. Posteriormente, arrepentido de sus convicciones, este hombre inició una vida de redención a través de artículos en la revista online Hope not Hate y charlas motivacionales creando así una especie de campaña de concienciación. Tal es así que la serie está dedicada a Jo Cox, la política asesinada por defender cómo todos venimos de inmigrantes y cómo la población que ha llegado de fuera del Reino Unido ha enriquecido su cultura.
Los autores de ‘The Walk-In’ son Paul Andrew Williams (dirección) y Jeff Pope (guión). Han orquestado una serie con algunas imágenes fuertes pero más potente aún es el discurso que han elaborado. Ya solo la primera ponencia que vemos nada más pasar la secuencia de apertura es oro puro. Pero el retrato no se realiza solo a través de alegatos y discursos surgidos del protagonista, también de aquellos que promueven el odio y la segregación. Habla de esa ultraderecha conspiranoica que, por ejemplo, ha costado cientos de miles de vidas con su negacionismo o corrupción durante la pandemia e incluso a la hora de reconocer el holocausto. Esa corriente política que solo ve violadores o intrusos que nos roban trabajo cuando otros ven personas que huyen de catástrofes o guerras. Bien es cierto que atentados como los de 2017 no ayudan pero no han de pagar justos por pecadores. Esto me recuerda a otro estreno reciente, ‘El viejo roble’, y me demuestra una vez más que hay una preocupación generacional sustentada en acontecimientos recientes.
El 5 de diciembre está disponible esta serie de 5 episodios. No puede llegar en mejor momento ahora que la juventud observa el auge de la ultraderecha por todo el mundo, guerras genocidas e hipócritas como la que mantiene Israel o arrebatos de violencia en cualquier barrio o ciudad. No está nada mal este ejercicio de reflexión y memoria histórica. Puede causar el efecto que provocó en su día ‘American History X’ o ‘Imperium’, espero que al menos haga ver que los grupos extremistas se aprovechan del descontento de la ciudadanía, de miedos infundados o del ensalzamiento de tradiciones basadas en supuestos pasados gloriosos para crear su causa. En este caso hablamos de cómo se coge a alguien que no tiene o no sabe exponer su ideología o motivación y hacerle pensar que forma parte de algo más grande. La serie tiene a bien destapar este tipo de movimientos maquiavélicos. La única lástima es que esa exposición se agota rápido y la serie necesita sustentarse demasiado en su suspense criminal y judicial.