Crítica: ‘The Witcher: Sirenas de las profundidades’

En qué plataforma ver The Witcher: Sirenas de las profundidades

Sinopsis

Geralt de Rivia, un brujo mutante y cazador de monstruos a sueldo, recibe el encargo de investigar una serie de ataques que han alterado la paz de un pequeño pueblo costero. Sin esperarlo, se ve inmerso en un conflicto que ha enfrentado a humanos y sirenas durante siglos. Para desentrañar el misterio y evitar que la hostilidad entre ambos reinos desate una guerra sin retorno deberá apoyarse en sus amigos de siempre y en aliados inesperados.

Crítica

The Witcher meets La Sirenita

Os voy a resolver lo primero de todo la curiosidad por la que probablemente hayáis entrado a leer esta crítica. Esta nueva película de animación basada en las obras de Andrzej Sapkowski (que no es la primera ya que se estrenó ‘La pesadilla del lobo’ en 2021) no cuenta con la voz de Henry Cavill. Pero en su sustitución tampoco con la de Liam Hemsworth. Prestan sus voces Anya Chalotra, Joey Batey, Emily Carey, Christina Wren, Mallory Jansen, Brittany Ishibashi… Todos ellos ya conocidos por la audiencia de la serie. Pero a Geralt de Rivia le dobla Doug Cockle. Una especie de acto de justicia ya que este excelente doblador de personajes de videojuegos es quien ha doblado al protagonista en los juegos. Eso sí, en la versión en español vuelve a ser Guillermo Romero, doblador habitual de Henry Cavill.

Dicho esto comentemos esta nueva aventura del brujo de pelo plateado. ‘The Witcher: Sirenas de las profundidades’ es una película episódica, sin ningún evento trascendental en la historia de Geralt de Rivia y si con mucho trasfondo para el cargante y fiel Jaskier. Es una historia que transcurre tras eventos como el de la niña de la sorpresa (Ciri), tras el encuentro con el Djinn o la aventura con el hombre lobo. Pero transcurre antes de visitar Caingorn y darse la masacre, como bien sabrán los conocedores de esta franquicia. Bien intuirán también los lectores que esta película de animación se basa en ‘Un pequeño sacrificio’, el relato incluído en ‘La espada del destino’.

Como tantas otras historias e ‘The Witcher’, razón por la que un servidor consideró los libros bastante vagos, la base un cuento clásico. En esta ocasión la aventura que bien tiene elementos también en común con ‘Aquaman’ se basa en ‘La sirenita’. ¡Llegan hasta cantar y no solo Jaskier! Buena parte del metraje es una historia la mar de arquetípica, nunca mejor dicho. Pero si metes una buena tijera a esa parte y nos quedamos con las historias y acción de Geralt y Jaskier, resulta que ‘The Witcher: Sirenas de las profundidades’ se queda en un entretenimiento, del tipo historia de cortes y corsarios. Por supuesto también tenemos el cuento de Hans Christian Andersen popularizado por la Disney embadurnado de monstruos, en esta ocasión de criaturas de las profundidades y el clasicazo del kraken.

Quizá la animación sea lo más digno de mención de esta pildorita que nos mantiene vivo al personaje hasta la llegada del menor de los Hemsworth. Studio Mir, los mismos de ‘La leyenda de Korra’, ‘DOTA: Sangre de dragón’ o la próxima versión del ‘Devil may cry’, son los responsables coreanos de este anime que sería más correcto llamar aeni. Su estilo se asemeja al de otras producciones de Netflix, véase ‘Castlevania’, por ejemplo. Las escenas de combate son dinámicas, con movimientos bien coreografiados y mezclas entre ataques y defensas, algo que Studio Mir ha perfeccionado en trabajos anteriores. La paleta de colores es sombría, con tonos fríos y contrastes marcados, lo que refuerza el tono adulto de la historia a pesar de que se base en un cuento infantil. Esto encaja con la atmósfera oscura y realista del universo The Witcher. Geralt tiene un aspecto más estilizado que en los videojuegos, con facciones más marcadas y una armadura detallada. Los diseños de las sirenas combinan elementos fantásticos con un enfoque casi mitológico e incluso lovecraftiano. Aunque predominan los trazos en 2D, algunos efectos de agua, iluminación y magia parecen apoyarse en CGI, lo que añade profundidad sin desentonar con el estilo general. En general ‘The Witcher: Sirenas de las profundidades’ aporta un estilo visual impactante y una ambientación fiel al mundo de Lobo Blanco.

Ficha de la película

Estreno en España: 11 de febrero de 2025. Título original: The Witcher: Sirens of the Deep. Duración: 90 min. País: Corea del Sur. Dirección: Kang Hei Chul. Guion: Rae Benjamin, Mike Ostrowski. Música: Joseph Trapanese. Reparto principal (doblaje original): Doug Cockle, Anya Chalotra, Joey Batey, Emily Carey, Christina Wren, Mallory Jansen, Brittany Ishibashi. Producción: Hivemind, Netflix, Platige Image, Stuio Mir. Distribución: Netflix. Género: fantasía, aventuras. Web oficial: https://www.netflix.com/title/81484026?s=i&trkid=258593161

Crítica: ‘The Witcher’ T3

En qué plataforma ver The Witcher

Un cierre de etapa de lo más insulso e inmerecido

Han pasado días desde que Netflix estrenó los tres últimos episodios de la tercera temporada de ‘The Witcher’, la última para Henry Cavill con este personaje, si nada cambia. He dejado un poco de espacio para asimilar precisamente ese hecho. A todos los que somos seguidores de esta historia y admiradores del antes Hombre de Acero nos cuesta digerir que un personaje tan bien interpretado vaya a desaparecer para ser sustituido por otro actor, el que sea.

Pero más allá de ver estos episodios desde la perspectiva de alguien que disfruta con el protagonista he intentado verla más objetivamente, analizándola como producto de entretenimiento. La primera tanda de episodios estrenados resultó bastante insípida, sin giros, sin emoción y además cortando en el momento álgido. El regreso, con el antepenúltimo episodio, estuvo mucho mejor. La purga en Aretusa era un momento esperado por los lectores y tiene escenas épicas, nadie discute que es lo mejor de esta temporada. Pero quien nos iba a decir que nos esperaría un penúltimo capítulo aburrido hasta el hastío, monótono, sin sustancia. Y ya ni hablar del final, que no tiene clímax, aunque tiene una pelea en una taberna que está mejor rodada que el resto de toda la temporada. Es una pena pues la calidad de la producción había mejorado mucho con respecto a la primera temporada, sobre todo en cuanto a diseño de escenarios. No que no ha mejorado es la calidad del doblaje en las canciones…

Aunque realmente no se sabe a qué altura de la producción el actor comunicó que terminaba con el personaje, da la sensación de que había más historia preparada y esto se ha quedado a medio camino. Porque si han orquestado estos episodios como una despedida o bien hay mucho resquemor hacia Cavill o bien no tienen amor ninguno por esta producción. Esta conclusión no tiene corazón, ni sentido de la métrica, ni del espectáculo.

Muy poco han progresado los personajes que están bastante estancados salvo por el hecho de que Ciri parece que por fin puede valerse por sí misma y que Geralt The Rivia va a salir de su neutralidad. Pero esto no se determina hasta el último episodio. Bien podría haber sido el episodio ocho el tercero o cuarto de esta T3 de ‘The Witcher’. También hay que admitir que quienes viven realmente un arco argumental que les hace evolucionar son algunos personajes secundarios como Vilgefortz, el príncipe Radovid o Tissaia.

Liam Hemsworth va a tener muy difícil igualar el papel de Cavill, por mucho que se inventen versiones multidimensionales o brujerías varias. La entrega del actor para con este personaje, tanto estéticamente como coreográficamente ha sido digna de alabanza, de las pocas cosas que para los lectores no tiene pega alguna. Pero superar la calidad de esta tercera temporada no le va a ser tan difícil, aunque eso va a ser realmente trabajo de los guionistas y directores, si Neflix no acaba cancelando estas adaptaciones. Esperemos que recuperen la senda correcta y se vuelvan a ceñir a los libros o recuperen a Cavill, por lo menos encuentren de nuevo el sentido del drama.

Impresiones de la serie ‘The Witcher’

Las novelas de Andrzej Sapkowski que se convirtieron en videojuego ahora son una satisfactoria serie

Allá por 1992 nacía la saga de Geralt de Rivia. El escritor Andrzej Sapkowski ponía en marcha una colección literaria que se ganó centenares de adeptos. Pero quizá fue quince años después con el lanzamiento del videojuego ‘The Witcher’ en 2007 cuando adquirió una relevancia y furor popular. Netflix se hizo eco y cargo del fandom de esta premiadísima saga y ha desarrollado la serie (para mejorar la que surgió previamente en Polonia bajo el nombre ‘The Hexer’) que se estrena hoy día 20 de diciembre de 2019.

En mi caso solo he leído las dos primeras novelas y probado el juego. Puedo entender el hype por la gran calidad de la versión para videoconsolas pero sinceramente, no por las novelas. De buenas a primeras los libros me parecieron una de las cosas más vagas que he leído en mucho tiempo. Se fundamentan excesivamente tanto en cuentos míticos (Aladín, Cenicienta, La Bella y la Bestia…) como en pilares de la fantasía como Dungeons & Dragons. Hasta el punto en que más que una inspiración son una adaptación. Casi te despistas más buscando el punto de interpretación de un clásico que conociendo los nuevos personajes. Sí que es cierto que según avanzas en el segundo libro se va descubriendo ya un nuevo universo, que seguro que se amplía en el resto de las novelas, pero que en su base resulta sobadísimo.

Si hay algo que hace bien la serie de Netflix es intentar eludir la mayor cantidad de referencias posibles a esas historias harto conocidas. Se percibe de dónde salen pero la manera en cómo se ha expuesto la trama hace que no sea tan evidente. La serie creada por Lauren Schmidt (‘The umbrella academy’, ‘Daredevil’) entremezcla las aventuras independientes del primer y segundo libro y consigue que aunque haya hazañas aisladas sí que tengamos una trama central mucho más identificable. Está montado de una manera diferente, al principio parece que ‘The Witcher’ es caótica e inconexa pero en el episodio 4 todo cobra más sentido para los profanos en las novelas o los juegos. En sus inicios parece que todo va a estar compuesto de lances independientes, pero según avanza la serie se va a haciendo ligeramente más compleja y vemos que todo está intrínsecamente relacionado.

La pregunta del millón es… ¿se parece al libro o a los videojuegos? Si que tiene ese aire de juego de rol, con múltiples personajes de diferente índole en un mundo fantástico con los que sentirse identificado. Pero a lo que más se asemeja es a las novelas, adaptando capítulos casi enteros y empleando sus momentos más identificativos.

‘The Witcher’ es una serie de 8 episodios en los que la aventura de capa y espada está muy presente. No sucede como en otras adaptaciones de novelas de fantasía como ‘El Señor de los Anillos’ o ‘Harry Potter’ en las que todos decíamos al unísono que estaba todo calcado. El estilo de Sapkowski es menos descriptivo y da menos lugar a ello. Pero si reconoces a los personajes nada más aparecer. La factura de la serie también se podría decir que varía de un escenario a otro o dependiendo de la trama. Se percibe el gasto económico pero hay momentos de auténtico bajón, sobre todo en lo que se refiere a lo visual y en interiores. Tal es así que podemos pasar de tener la sensación de estar al nivel de producción de ‘Juego de Tronos’ a encontrarnos casi siempre con el tono de series como ‘La leyenda del buscador’ o ‘Merlín’ e incluso a estar viendo un documental barato sobre la Edad Media.

El rodaje ha transcurrido entre Las Palmas y Europa del Este, como no podría ser de otra manera dada su ambientación y orígenes. Nos brinda paisajes muy logrados y adecuadamente manipulados por ordenador para conseguir una atmósfera oscura, medieval, mágica y en ocasiones triste. Se percibe que el dinero de la producción se les ha ido en pagar a Cavill y en muchas de las partes que contienen imágenes realizadas de modo digital. Esto se percibe sobre todo en los lugares que visita Geralt y en los monstruos a los que se enfrenta. Pero no todo es CGI, hay buen maquillaje, tipo ‘Ash Vs Evil Dead’, con criaturas de lo más asquerosas y sanguinarias que los lectores de las novelas o de las historias de fantasía van a reconocer.

Lo que echo en falta en una producción con tanta expectativa es más exigencia a las interpretaciones de protagonistas como Anya Chalotra (Yennefer) e incluso Henry Cavil. Eso y que se puliese la escenografía y los detalles de CGI algo más.

De la serie se salva sobre todo ver a Cavill haciendo salvajadas con la espada, para los que gozamos de la sangre y las contiendas encarnizadas la serie tiene también en todos los episodios buenos momentos. Me ha gustado el cómo se ha adaptado el lenguaje literario a serie, dándole a todo un ritmo más ágil y aportando más detalles según avanzamos. El reparto no tiene actores archiconocidos a parte del actual Hombre de Acero pero gana con personajes como Jaskier (Joey Batey), que me parce el mejor interpretado. Buena elección la de este actor que está versado en este tipo de series y además es capaz de leer idiomas medievales en la vida real. Seguro que la canción que le compone al brujo la vais a tener pegada a la cabeza y van a surgir decenas de covers (espero alguno en modo heavy metal). ¡Toss a coin to your witcher!

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
Moviementarios
Salir de la versión móvil