Crítica de ‘¡La serie de Cuphead!’

Netflix se lo pasa pipa jugando con los aventureros con cabeza de taza

Desde el 18 de febrero se puede ver en Netflix ‘¡La serie de Cuphead!’ que adapta el juego de los canadienses StudioMDHR que en su día califiqué como “un Dark Souls a lo retro” en mi blog personal. Seguro que si habéis jugado a ese videojuego estáis de acuerdo conmigo en cuanto a su dificultad. Lo cierto es que es uno de los grandes videojuegos de los últimos años, todo un bombazo de los hermanos Chad Moldenhauer y Jared Moldenhauer.

Esta serie tiene 12 episodios de 15 minutos cada uno dirigidos en los impares por Adam Paloian y en los pares por Clay Morrow a partir de los guiones que han escrito junto a Deeki Deke, Cosmo Segurson y Dave Wasson. Este último es quien ha desarrollado la serie. Y no es de extrañar que Wasson haya estado implicado en el proyecto pues de 2013 a 2019 estuvo trabajando en los nuevos dibujos animados de Mickey Mouse, personaje y universo con el que los protagonistas conservan un cercanísimo estilo visual.

Por supuesto en ‘¡La serie de Cuphead!’ se ha conservado al estilo de los dibujos animados antiguos con todo lo que eso conlleva, títulos de crédito, escenarios, todo tipo de personajes antropomórficos, movimientos… Es un shoot ‘em up con movimiento en 2D lateral, pero para la serie obviamente se han incorporado técnicas modernas que sirven para la narrativa. Hay algunas veces que se realizan movimientos casi 3D en los que parece que se ha rodado con maquetas, unas que por cierto podrían ser de Tim Burton. El estilo es tan retro que entre los diversos personajes que aparecen en los episodios podrían figurar las versiones antiguas de Goofy, Mickey o el gato Félix y se integrarían de sobra. De hecho, hay un guiño a ‘Fantasía’ y Cuphead tiene el traje de Mickey en su armario.

¿De qué va ‘¡La serie de Cuphead!’? Básicamente de dos gamberretes y descerebrados aventureros que se meten en líos. Entre lance y lance vemos como van evitando que el Diablo se haga con el alma de Cuphead. Si te gustan los gameplays también te gustará esta serie pues al fin y al cabo es ver las travesuras y persecuciones de los dos hermanos con cabeza de taza. De hecho, aparecen muchísimos personajes del videojuego, predominando los jefes finales, a los cuales se les da algo de contexto e historia. En esta primera parte de la serie (si, estos son los 12 primeros de más episodios que habrá) están Ribby and Croaks, The Root Pack, King Dice y por supuesto The Devil entre otros muchos.

En esas aventuras se produce un ambiente bastante demencial. Miedo, angustia, conductas imitables y violencia es lo que rezan las advertencias que pone Nerflix junto a la categoría de edad. No obstante, se nota que la serie carece de cualquier tipo de crítica, es naif y si no fuese por ciertas groserías o momentos cafres podría ser apta para público infantil. Es un poco ‘Animaniacs’ o sigue las locuras de muchas series de Nickelodeon pero para espectadores un poco más creciditos, es decir, los que han podido jugar a videojuego. De todos modos mejor que unos niños no la vean y tengan ganas de jugarlo porque se pueden volver majaras con su dificultad.

Por supuesto la música, como en el juego, está omnipresente. La serie suena al blues, jazz y soul con el que se acompañaban los dibujos de principios del siglo XX. Dado el carácter liante de los hermanos (Cuphead es un buscalíos y Mugman la voz de la conciencia) y la música que tiene ‘¡La serie de Cuphead!’ podría llamarse ‘Granujas a todo ritmo’, como el filme de John Landis. Alude visual o musicalmente a muchos Blues Man históricos. De hecho cuando sale King Dice rememora totalmente al Minnie the Moocher de Cab Calloway.

Cabe señalar, aunque sea con un par de líneas, que las canciones están muy bien adaptadas al castellano, en traducción y en voz, al nivel de ‘Hora de aventuras’. Y el doblaje más de lo mismo. En el juego no tenemos las voces de los personajes y aquí se ha contado con Best Digital quien ha escogido a actores de doblaje como Rafael Romero, David Robles, Guillermo Romero o Carlos Ysbert (Homer Sipmson).

No se puede ser más audiovisualmente nostálgico que ‘¡La serie de Cuphead!’. Con este estilo Disney de los años 30 pero con su a veces toque un tanto macabro la serie me ha gustado. Aunque tenga un tono un tanto infantil nos divierte y devuelve a aquellos muñequitos de Mickey y sus amigos que nos tocaban en los huevos Kinder.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
Salir de la versión móvil