Segundo documental sobre Gonzalo Boye
Producida y dirigida por Sebastián Arabia y con guion de Gustavo Ducasse, comenzará en los próximos días el rodaje del documental ‘Boye (el enemigo público)’. Es la segunda parte de la película documental ‘Boye’ que se realizó con gran repercusión en el 2016 y que retrataba la trayectoria profesional y vital de Gonzalo Boye, quien pasó de ser procesado y encarcelado por colaborar con ETA en el secuestro de Emiliano Revilla – hecho por el que siempre ha defendido su inocencia – a convertirse en un brillante abogado, participando en casos rutilantes y mundialmente conocidos como el juicio por los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, la defensa de Edward Snowden, las querellas contra “los seis de Bush” (los que diseñaron el soporte jurídico que creó la cárcel de Guantánamo) y contra las autoridades de Israel en dos ocasiones por crímenes de lesa humanidad, entre otros muchos.
En esta ocasión, Gonzalo Boye se enfrenta a las más altas instituciones judiciales del Estado español por la defensa de Carles Puigdemont y los exiliados independentistas catalanes del procés, razón por la cual es víctima (según su propio relato) de una campaña de desprestigio orquestada por las “cloacas del estado” en su contra, para acabar con su reputación, imputándole un delito de blanqueamiento de capitales por el que la fiscalía de la Audiencia Nacional le pide 9 años de prisión.
¿QUIÉN ES GONZALO BOYE?
Nacido de Viña del Mar, Chile, el 3 de abril de 1965, Gonzalo Boye es empresario, abogado y ex editor de la revista Mongolia. Hasta agosto de 2017 perteneció al Consejo de Administración de eldiario.es Como abogado ha intervenido en causas de una enorme repercusión nacional y/o internacional. Fue abogado de la acusación popular en los juicios del 11M, abogado defensor en el caso 4F, abogado de la acusación popular por la causa de los papeles de Bárcenas y ha sido también el abogado defensor al rapero conocido como Valtònyc. En el año 2009 se querella contra seis de los principales asesores jurídicos del presidente de EE. UU George W. Bush, por diseñar el marco jurídico que amparaba la apertura y existencia de la cárcel de Guantánamo. Su nombre apareció en las filtraciones de Wikileaks. Es miembro del equipo de abogados de Edward Snowden y el caso de las revelaciones sobre la red de vigilancia mundial de los servicios de inteligencia norteamericanos. Se querelló en dos ocasiones contra el ejército israelí por el bombardeo del barrio palestino de Al Daraj y por el ataque a la Flotilla de la Libertad. A finales de 2017 pasó a formar parte de la defensa de Carles Puigdemont. Ha escrito 4 libros “Así están las cosas” (2020), “Ya ahí lo dejo: Crónica de un proceso”, “¿Cloacas? Sí, claro” (2021) y “Se llama cáncer” (2022) En 1996 fue condenado por la Audiencia Nacional a 14 años de prisión por colaborar con ETA en el secuestro del empresario Emiliano Revilla, hecho del que siempre ha defendido su inocencia. Actualmente está imputado por un delito de blanqueo de capitales.
Los atentados yihadistas cometidos el 11 marzo 2004, tres días antes de las Elecciones Generales, desataron en España un terremoto político cuyas consecuencias aún estamos digiriendo. Tal conmoción llevó a una parte del Gobierno a acusar a la banda criminal ETA. El presidente llamó a directores de periódicos y se precipitó con un telegrama a embajadas y organismos internacionales el mismo día 11, a las 17:30 hrs. Origen y causa de la manipulación mediática que vino después.
Pedro J Ramírez, Casimiro García Abadillo y Federico Jiménez Losantos, con mentiras y medias verdades, acusaron a policías, jueces y fiscales de conspirar para encubrir a terroristas (por ejemplo, «Informe ácido bórico», 2006). Ignoraron y despreciaron las sentencias de Audiencia Nacional (2007) y Tribunal Supremo (2008). Con el apoyo político de Eduardo Zaplana (300 preguntas parlamentarias), Ángel Acebes, Esperanza Aguirre y otros, continuaron con sus “teorías de la conspiración del 11 M” varios años más.
Aún, en junio de 2009, estos periodistas seguían insistiendo en la autoría de ETA con la promoción del libro «Titadyn» (nombre de dinamita utilizada por ETA). García Abadillo lo prologó con una extensa recopilación de las “teorías” y especulaciones que ellos habían difundido.
Con su mala praxis periodística dividieron a las victimas y causaron la crispación social y política cuyas secuelas aún están presentes.
Nunca debió de darse esta situación. Los TEDAX, dos horas después de las explosiones y antes de neutralizar dos bombas que no explosionaron (Atocha y El Pozo), observaron que la sustancia explosiva era de color blanco. No de color rojo como la dinamita Titadyn utilizaba ETA. Datos comunicados inmediatamente a las autoridades policiales.
Así consta en página 30 y en documento nº 5 del anexo del libro «Las Bombas del 11-M. Relato de los hechos en primera persona». (Amazon 2014) del que fuera jefe de los TEDAX, comisario Juan Jesús Sánchez Manzano. Acceso gratuito biblioteca universitaria Dialnet.
En el 2022 se ha estrenado en Netflix una película-documental “11 M (2022)” y serie en Amazon “Desafio: El 11 M”. Ambas muy interesantes.