En qué plataforma ver Maria Callas
Sinopsis
‘María Callas’, la nueva película dirigida por Pablo Larraín, narra los últimos días de vida de la legendaria soprano María Callas en el París de los años 70. La película, protagonizada por Angelina Jolie, sigue un enfoque similar al de otras obras de Larraín, como Jackie y Spencer, explorando momentos específicos y cargados de emoción en la vida de estas icónicas mujeres.
Crítica
Jolie espléndida. Larraín anclado en el homenaje contemplativo basado en su propia imaginación
El cine de Pablo Larraín ha establecido una marca distintiva en el género biográfico, con una fijación casi obsesiva por desmenuzar a figuras icónicas, humanizarlas y al mismo tiempo, rendir homenaje a su legado. ‘Maria Callas’, protagonizada por Angelina Jolie, se suma a este corpus como un estudio íntimo y melancólico sobre los últimos días de la diva de la ópera, pero con un enfoque que, aunque admirable, se siente algo distante y poco efectivo, sin embargo, lejos de lo desastroso que fue ‘Spencer’.
Angelina Jolie encarna a Maria Callas con un porte elegante y un aire trágico que captura la fragilidad emocional de la soprano. Jolie no intenta imitar a Callas de manera literal (como comprobamos con las imágenes de los créditos), sino que interpreta su esencia con una profundidad emotiva que resulta conmovedora. Sin embargo, la película tiende a apoyarse demasiado en la presencia magnética de Jolie, dejando que la narrativa se deslice en una contemplación que a veces roza lo estático. Aunque el trabajo de Jolie es notable, no alcanza el nivel transformador de Natalie Portman en ‘Jackie’, donde Larraín parecía estar en completa sintonía con sus protagonistas. Aún así el enfoque psicológico aporta un matiz interesante a buena parte de la película, empleando metáforas y un poco de imaginería. Sin embargo, esta decisión también subraya un problema narrativo: la película parece preocupada por construir un homenaje atmosférico y subrayar como fantasmas los conflictos internos de La Callas, pero carece de hilo y es redundante.
En términos visuales, Maria Callas es un deleite, como es habitual en el cine de Larraín. La fotografía evoca tanto la opulencia de la ópera como la soledad de los escenarios vacíos. El filme parece gritar que las arias y cantos líricos que entonan tenores y sopranos también están dirigidos proféticamente a un arte que caerá en el olvido o el menosprecio. Prueba de ello es la mismísima secuencia inicial, la cual supone un repaso más propio de un epílogo que de un prólogo. Con muchos planos kubrickianos y ensalzando una opulencia muerta, las imágenes, a veces también de una grandiosidad que nos achica, amedrentan cualquier espíritu alegre u optimista con el que hayamos podido entrar a la sala. ‘Maria Callas’ es un filme triste y nostálgico.
La comparación con otros biopics de Larraín es inevitable. En ‘Jackie’, la viuda de Kennedy se enfrenta al duelo mientras navega por un panorama político implacable, brindándonos una oportunidad única de explorar una parte menos considerada en un momento tan histórico como el recogido por la cinta zapruder. En ‘Spencer’, Diana de Gales experimenta una crisis existencial en un entorno sofocante y una semana decisiva. Ambas películas presentan a mujeres atrapadas en jaulas doradas, pero ‘Maria Callas’ lo que hace es intentar elevar la intensidad psicológica a través de traumas y divagaciones imbuidas por medicamentos. Mientras que ‘Jackie’ y ‘Spencer’ se desarrollan en momentos críticos de las vidas de sus protagonistas, ‘Maria Callas’ opta por un enfoque más reflexivo y menos narrativamente dinámico, lo que podría desilusionar a algunos espectadores. En cuanto a su comparación con ‘Neruda’ y ‘El Conde’, este largometraje tiene mejor ritmo que la cinta sobre el poeta y carece absolutamente por completo del toque satírico o crítico de la experimentación empleada en la obra sobre el dictador. Larraín utilizó elementos metaficcionales y surrealistas para explorar a los personajes chilenos, pero en ‘Maria Callas’ adopta un enfoque más convencional y respetuoso. Si bien esto es apropiado para el personaje, también limita las posibilidades creativas de la película. No obstante, lo que queda claro es que Larraín se encuentra cómodo rellenando con su imaginación episodios y momentos íntimos de celebridades que nos dejaron.
Uno de los aspectos más interesantes de ‘Maria Callas’ es como retrata el aislamiento que acompaña a la grandeza, los anhelos por controlar la vida propia y una obsesión inmoladora por el canto. Larraín muestra a Callas como una mujer atrapada entre su arte y aquellos que facilitaron sus vicios y necesidades, lo cual empieza a ser un tema recurrente en su filmografía. Sin embargo, mientras que en ‘Spencer’ o ‘Jackie’ este cautiverio se traduce en un drama urgente, aquí se siente más como un retrato estático, como si Larraín estuviera más interesado en observar a Callas desde la distancia, sin prisas por rendirle homenaje.
En última instancia, ‘Maria Callas’ es una obra visualmente impresionante y emocionalmente resonante, pero no alcanza el impacto de las mejores películas de Larraín. Angelina Jolie ofrece una interpretación digna de admiración, pero la película, aunque sólida, carece de la chispa innovadora que caracteriza los trabajos más audaces del director chileno. Es una pieza que probablemente será apreciada por los amantes de la ópera y los seguidores tanto de Callas como de Jolie, pero que podría dejar a otros anhelando una conexión más profunda y visceral o por lo menos un chorreo de información más sugerente.
Ficha de la película
Estreno en España: 7 de febrero de 2025. Título original: Maria. Duración: 124 min. País: Italia, Alemania. Dirección: Pablo Larraín. Guion: Steven Knight. Fotografía: Edward Lachman. Reparto principal: Angelina Jolie, Pierfrancesco Favino, Alba Rohrwacher, Haulk Bilginer, Kodi Smit-McPhee, Stephen Asfield. Producción: The Apartment, Komplizen Film, Fabula. Distribución: Diamond Filmas. Género: drama, biográfica. Web oficial: https://www.komplizenfilm.de/en/movies/maria